En los centros de formación profesional, se desarrollaron mejoras en las áreas técnico-pedagógico, de gestión institucional, de infraestructura y equipamiento y de vinculación laboral.
La Cooperación Suiza concluye de esta forma ese proyecto y, en general, 17 años de cooperación bilateral a este ámbito estratégico en términos de fortalecimiento de las capacidades para la empleabilidad y aporte a la productividad del país con 53 millones de dólares.
En estos últimos cinco años, más de 24.600 personas egresaron o se capacitaron en centros de formación técnica. El proyecto contribuyó a que un 36% de las personas que no tenían empleo o autoempleo antes de la formación técnica, obtuvieran un empleo o autoempleo remunerado una vez concluidos los estudios.
Los egresados de estos centros de formación técnica mejorados ganaron más dinero una vez insertados en el mundo laboral. En 2021, por ejemplo, ese incremento mensual representó el 36%, es decir cerca de 100 dólares mensuales.
El evento contó con la presencia de autoridades educativas, destinatarios, representantes del cuerpo diplomático, empresarios y entidades educativas.
El objetivo principal del proyecto fue contribuir, a través de una formación mejorada en el país, a una mayor equidad económica y social, proporcionando oportunidades de acceso al empleo a la población vulnerable a la pobreza. También ofreció el proyecto capacitación laboral adecuada a las necesidades de los entornos sociales, y productivos.
El proyecto Formación Técnica Profesional (FTP) enfocó su trabajo en brindar nuevas e innovadoras posibilidades de educación de calidad, principalmente a jóvenes y mujeres y en contextos adversos como fue la pandemia para dar continuidad a la formación de las personas jóvenes.
“Los centros que apoyamos promueven el desarrollo de habilidades como el pensamiento crítico, la resolución de problemas, creatividad y disciplina. Estas habilidades son valiosas en cualquier entorno laboral y permiten a los individuos adaptarse a los cambios tecnológicos y las demandas del mercado”, señaló la embajadora de Suiza en Bolivia, Edita Vokral.
Este trabajo fue realizado en apoyo al Ministerio de Educación, actor fundamental para el impulso de una política pública de formación técnica. El proyecto coordino con los subsistemas de Educación Alternativa y Especial, que incluye al Sistema Plurinacional de Certificación de Competencias, el subsistema de Educación Superior de Formación Profesional y el sector empresarial para generar inserción laboral de jóvenes.
“Ante la política de la industrialización del Estado boliviano, la formación técnica desempeña un papel fundamental en el desarrollo económico y social de país”, indicaba el viceministro de Educación Superior de Formación Profesional, José Luis Gutiérrez.
El proyecto Formación Técnica Profesional fue ejecutado por el consorcio Swisscontact Fautapo, el Sistema Plurinacional de Certificación de Competencias, el Gobierno Autónomo Municipal de La Paz, Cemse-CEE, la Fundación Infocal, la Cooperación Alemana GIZ, Nestlé, la Fundación Banco Mercantil Santa Cruz y Solidar Suiza.
La Embajadora Vokral destacó en esta ocasión “Ha sido un privilegio acompañar en este trayecto a Bolivia y estamos convencidos de que seguirán avanzando de forma decidida en este proceso en los años venideros.