La semana pasada, el jueves 17, la gerente de Productos Derivados e Industrializados de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Gabriela Delgadillo, informó que entre el martes y jueves se registraron ventas al mercado interno de aproximadamente 6 mil toneladas, lo que duplica la expectativa inicial que bordeaba las 3 mil toneladas.
Eso se explica porque empieza la temporada de demanda alta para la urea por la campaña de verano en el oriente en cultivos como arroz y maíz, así como la época de fertilización en la caña de azúcar, complementó.
Asimismo, manifestó que la Asociación Nacional de Productores de Oleaginosas (Anapo), Unión de Cañeros, Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) y otras agroindustrias, además de clientes individuales y distribuidores, reaccionaron inmediatamente al precio fijado y se contactaron con el equipo comercial de YPFB para cerrar las compras.
Delgadillo explicó que los precios fijados por YPFB son muy ventajosos para los agricultores nacionales, quienes, hasta ahora, estuvieron comprando en el exterior la tonelada de urea a un precio alto que oscila entre 750 y 800 dólares la tonelada. Además, mencionó que “el usuario de este fertilizante estaba cansado de pagar precios elevados. Al ver los precios accesibles que fijamos, quieren asegurarse la cantidad de urea que necesitarán para su tarea productiva”.
Delgadillo manifestó que las ventas también son exitosas para el mercado de exportación. En el primer año del reinicio de sus actividades productivas (septiembre 2021-septiembre 2022), la PAU estima producir 590 mil toneladas a una tasa promedio de operación del 85 %. De ese volumen, entre el 8 y 10 % está destinado al mercado interno.
Los excedentes serán exportados a los mercados de Brasil, Argentina, Paraguay, Uruguay y Perú. “Como resultado de las gestiones comerciales ya se tiene acomodada más del 60 % de la producción de urea a mercados de exportación”, finalizó Delgadillo.