El dÃa dedicado a los difuntos reúne a las familias para recordar a sus seres queridos que ya no están en el mundo terrenal. Desde muy temprano, el ajetreo se apoderó de los camposantos y las tumbas se iluminaron con flores, coronas y velas.
Miles de familias emprendieron un recorrido por los cementerios para cumplir con el deber de honrar a sus difuntos. Desde la mañana, las puertas de los camposantos se abrieron para permitir el ingreso de familiares y amigos.
En silencio, con lágrimas, colocando ramos de flores, coronas y ofrendas, las familias se reunieron en los mausoleos y tumbas para elevar plegarias por el alma de los que duermen el sueño eterno. Por los estrechos pasillos de los panteones también se escuchan cantos, rezos y anécdotas en homenaje a aquellos que ya no están entre nosotros.
En el cementerio Sagrado Corazón de Jesús las ofrendas para los difuntos estuvieron sobre las lápidas y en mesas que los dolientes armaron con devoción y esmero. Tantawawas con figuras femeninas y masculinas fueron colocadas en varias sepulturas, junto a las fotografÃas de los seres queridos fallecidos.
Otras familias, como los Vega Lobo, acomodaron una mesa en honor a Abdón Vega Villarroel, Rosita Lobo Alba y José Lobo. Hay una variedad de panes, frutas, agua y bebidas.
Los hijos y parientes no se olvidaron de ningún detalle, porque quieren recordar de la mejor forma a sus seres queridos, por eso también colocaron una escalerita de pan. “Es para que ellos vayan escalando hacia el Señorâ€, dijo Rosario Vega.
En esta festividad, también se acortan las distancias y acuden a visitar a los suyos en su última morada. Roxana Miranda Hurtado llegó desde Potosà para visitar el nicho de su padre. Junto con sus familiares acudieron para colocar flores y velas. “Hemos traÃdo masitas tÃpicas de Potosà que preparamos con un quintal de harina para unas 250 personasâ€, contó.
Relató que en su tierra natal todo este mes de noviembre es dedicado a los difuntos, puesto que en Todos Santos en las casas se arman altares con masitas, otros alimentos y bebidas que gustaban al difunto. En Todos Santos preparan platos tradicionales como el ajà de achacana y el misky plato.
Este 2 de noviembre, a mediodÃa, levantan la mesa, y para ello designan a una persona. Después acostumbran a realizar el tradicional acto del alma cacharpaya en los domicilios donde se armaron las mesas. “La persona que levanta la mesa (es como un padrino) trae algún presente y se hace una especie de juego y una comida para despedir al alma. Las celebraciones cierran el 30 de noviembre que es la fiesta de San Andrés, donde toda la gente se vuelca a los cementeriosâ€, comentó.
En el mausoleo de la familia Rojas habÃa ocho tantawawas para cada uno de sus difuntos, con sus banderines negros. Las luces de las velas, cruces e imágenes recargables también iluminaban cada una de las tumbas.
Otros solo prefieren dejar flores. Enriqueta Rojas, junto con su hija Lidia, acudió muy temprano al cementerio Ambrosio Villarroel para dejar coronas y cadenas sobre las tumbas de sus seres queridos. Ella es de Cochabamba, donde hay una serie de tradiciones, pero desde que son miembros de una iglesia evangélica ya no las siguen.
Felicidad Aguilera (63) también llegó al cementerio Ambrosio Villarroel para rezar por las almas de sus nietos, que fallecieron cuando eran pequeños. Ayer, en el dÃa dedicado a las almas de los niños, les llevó flores, velas y coronas. Inclinada sobre las tumbas elevó varias oraciones y esperaba a los rezadores que ofrecen el servicio a cambio de unas monedas.
LOS QUE ACOMPAÑAN
Cristal Marza Aiza (50), con su guitarra al hombro recorre los pasillos del cementerio de la zona de La Cuchilla, desde hace tres años acompaña con su canto a los dolientes. La gente la recompensa con algo de dinero por cada canción que interpreta. Le pide las canciones que eran las preferidas del difunto.
Las tradiciones se vivieron en medio de controles para evitar el ingreso y consumo de bebidas alcohólicas. También existió personal para ordenar el tráfico en los alrededores de los camposantos. (El Deber)