La Representación de la UE ante las instituciones palestinas y diez países europeos, incluida España, instaron a Israel a poner fin a las demoliciones y confiscaciones de terrenos en Cisjordania y han pedido una compensación por las infraestructuras destruidas construidas con fondos humanitarios.
«Israel, como potencia ocupante, debe cesar todas las confiscaciones y demoliciones y permitir el acceso a las organizaciones humanitarias a la Cisjordania ocupada, incluido Jerusalén Este», sostuvo la representación de la UE en Ramala en una declaración firmada además por los consulados de España, Bélgica, Francia, Italia, Suecia y Reino Unido y por las oficinas de representación de Dinamarca, Finlandia, Alemania e Irlanda.
En concreto las misiones diplomáticas han pedido a Israel la devolución de todos los materiales humanitarios adquiridos por el consorcio de donantes e incautados o destruidos desde 2015, o una compensación equivalente que estiman en 1.291.000 euros.
En particular, el comunicado condena la reciente demolición de la escuela de Yubbet Adh Dhib, en Bayt Tamar, a las afueras de Belén, por parte del Ejército israelí y recuerda que otras 57 escuelas de Cisjordania están amenazadas de demolición.
También menciona los más de 1.100 palestinos de Masafer Yatta que corren riesgo de ser expulsados de sus hogares de forma forzada y recuerda que el Derecho Internacional Humanitario prohíbe este tipo de desplazamientos. Otras 48 familias podrían ser expulsadas de Jan al Ahmar.
Las misiones diplomáticas han condenado la «violencia de los colonos en los términos más contundentes» y han denunciado que «Israel no protege a los palestinos ni persigue a los colonos violentos» y cita como ejemplos los recientes incidentes de Huwara o Burqa.
En esa línea, advierte de las «declaraciones peligrosas que pueden incitar a más violencia» y resalta que «la ampliación de las colonias tiene como consecuencia una mayor violencia de los colonos».
En cualquier caso, los firmantes «condenan por igual la muerte de palestinos e israelíes» y recuerdan el elevado número de muertes en lo que va de año en Cisjordania, incluida Jerusalén Este. (Europa Press)