Así manifestó el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, quien reconoció que la resolución aprobada en la víspera por la Asamblea General de la ONU, demuestra que el mundo quiere que este conflicto termine.
Miller señaló que las Fuerzas de Defensa de Israel quizás sí son capaces de derrotar a Hamás, pero no se puede derrotar una idea en el campo de batalla, reconociendo así sus dudas respecto al futuro en Gaza tras una hipotética victoria israelí.
“Al final de este conflicto, es necesario que haya una respuesta legítima para las aspiraciones del pueblo palestino”, manifestó Miller, que deja en manos de Estados Unidos, Israel y otros Estados de la región, la solución a esta situación.
En este sentido, indicó que la Autoridad Palestina, liderada por Mahmud Abbas, es la representante del pueblo palestino y que, si se revitaliza, reforma y renueva, puede ser el camino adecuado para gobernar una Cisjordania y Gaza reunificadas.
Sin embargo, a pesar de mostrar su visto bueno para que la Autoridad Palestina gestione en un futuro el enclave palestino, Miller advirtió que obviamente la Autoridad Palestina no está en posición de intervenir mañana y comenzar a administrar Gaza.
Estas declaraciones se producen después de que la Asamblea General de la ONU aprobara por abrumadora mayoría una resolución en favor de un “alto al fuego inmediato” en Gaza después del veto de Estados Unidos a una medida similar en el Consejo de Seguridad.
Jake Sullivan, asesor de Seguridad Nacional del gobierno de Joe Biden, viajó ayer a Israel para reunirse con el primer ministro Benjamín Netanyahu.
John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad de la Casa Blanca, declaró que Washington comprende la “intención” de Israel de eliminar a Hamás, pero instó a las autoridades israelíes a que tomen nuevas medidas para proteger a los civiles de cualquier daño. (Infobae)