“Esta es el área donde se han habilitado cinco unidades más y llegan a 13. Esto es la luminoterapia donde los bebés reciben su tratamiento con fototerapia, aquellos que tienen ictericia y también para cuidados mínimos, que son pacientes que nacen prematuros y necesitan ganar peso para poder irse a la casa”, informó la directora del nosocomio paceño, Rosalín Ustarez.
El responsable del Área de Pediatría del hospital de Cotahuma, Wilder Tarqui, detalló que también se hizo la adquisición de oxímetros, un bilirrubinómetro, balanza de precisión, escritorio, impresora y ropería para el cambio de los bebés, entre otros.
“Los equipos que ven acá son oxímetros de pulso para mantener el control estricto de los signos vitales, la mayoría de los problemas neonatales van por la parte respiratoria, incluyendo dificultad o dependencia de oxígeno que puede durar varios días”, en tanto que el bilirrubinómetro es un equipo “destinado a orientar más rápida y de forma segura la necesidad o no de una internación, además de poder hacer diagnósticos mucho más tempranos y no retrasarlos por el hacinamiento”, explicó el experto.
En el área del lactario se tiene nuevo equipamiento de refrigeración y esterilización de biberones conforme establecen las normas de bioseguridad. De acuerdo con autoridades ediles y de ese establecimiento médico, ambos ambientes responden a la necesidad de evitar el hacinamiento de los neonatos y darles mejores condiciones de atención médica, con calidad y calidez.
El Hospital Municipal de Cotahuma, en su inauguración, solo se contaba con dos unidades para cuidados mínimos en el área de neonatología. A la fecha, tiene 13.