“De las palmeras no solamente podemos sacar el aceite, sino tenemos que ver el impacto social que podemos generar y darle un uso totalmente integrado, tanto de la fruta como del provecho de la pastura. No hay peligro de sostenibilidad”, afirmó Roberto Unterlastatter, profesor emérito en ciencias agrícolas de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (Uagrm) durante su participación en el panel sobre materias primas del mencionado proyecto.
Por ejemplo, en Santiago de Chiquitos y Ascensión de Guarayos existen asociaciones de hombres y mujeres que se dedican a la recolección de copaibo y cusi, respectivamente, para la recolección de resinas, producción de cremas, jabón y champú en pequeña escala.
El panel se desarrolló tras la presentación del Proyecto “Diésel Renovable, emprendimiento que se constituye en pionero en su género en América Latina y que procesará 450 mil toneladas de materia prima al año, producirá 9 mil barriles al día y 3 millones de barriles al año. Proveerá un combustible con 80% menos contaminante que el combustible de origen fósil. Permitirá un ahorro de $us 400 millones por subvención. Se estima una inversión de 250 millones de dólares.
Desde el punto de vista del Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Luis Arce Catacora, “esta planta será el paso definitivo hacia la independencia energética. Gracias al gobierno, YPFB y a empresas nacionales, la segunda generación de combustibles limpios será una realidad, generará múltiples beneficios económicos y medio ambientales para nuestro país”.
El 2019, el gobierno estaba impulsando el biodiésel, y para ello se apuntaba a la ampliación de la frontera agrícola, y estaba involucrado el girasol.
MATERIAS PRIMAS
Entre las materias primas que se mencionaron en el panel para la elaboración del biodiesel, está la soya, totaí, motacú, jatropha y el piñón entre otros productos.
Por su parte, Freddy García, representante de Promasor, dijo que, “si nosotros agarramos la soya como base del biocombustible no estamos afectando la seguridad alimentaria de Bolivia que es muy importante mantenerla, creo que el cultivo de la soya se convierte en el puntapié inicial para el proceso del biodiesel, fíjense que van a venir otros cultivos que es lo fabuloso de este proceso del biodiesel porque podemos agarrar varias materia primas, no solamente la soya, viene la Jatropha que es muy importante para nosotros por la concentración del nivel de aceite que tiene”.
La intervención de James Jhonson, ex alumno de la Universidad Agroforestal de Oxford, destacó la ecoeficiencia de la producción de diésel renovable. Propuso “concentrarse en la eficiencia ambiental, en la eficiencia energética a través del uso combinado de la tierra entre plantaciones perennes (las que viven más de dos años) y cultivos anuales, como el maní, frejol, sorgo entre otros”. A su juicio no hay un cultivo mágico que sustituirá al diésel. Los tres expositores coincidieron en destacar la sostenibilidad del proyecto presentado por Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos. Adicionalmente, sugirieron realizar un censo para identificar las zonas donde se registran con mayor densidad el cultivo del totaí y así mismo un estudio de germinación; al igual que para las otras materias primas.
“Los agropecuarios lo tomamos como un desafío, como una oportunidad de producir otros cultivos. Estamos con beneplácito porque el Estado a través de Yacimientos nos levanta el dedo y nos dicen: ´vayan a trabajar hay una nueva oportunidad de generar recursos´ y nosotros estamos contentos con el biodiesel”, afirmó Freddy García al cierre del panel.
Al respecto, el presidente ejecutivo de YPFB, Wilson Zelaya dijo –durante la presentación del proyecto que se desarrolló horas antes del panel sobre materias primas- que la estatal petrolera espera concretar alianzas con los agropecuarios a fin de implementar este proyecto a la brevedad posible. “Tenemos la oportunidad de iniciar conversaciones y conformar alianzas con ellos”.