Jubileo señala que la situación de las finanzas públicas registra un constante deterioro, principalmente desde el año 2015, lo que se profundizó con la crisis del coronavirus, en cuyo año empezó la desaceleración de la economía.
Sostiene que los ingresos por impuestos previstos para el 2021 se reducen en más de 20 %, en comparación con gestiones previas, efecto que influirá en los presupuestos de los gobiernos subancionales, principalmente municipios que dependen en gran medida de la coparticipación de impuestos, ya que registran una disminución considerable de sus recursos. Finalmente, se habría detenido la expansión del gasto corriente que se dio por muchos años, pero el nivel alcanzado estaría muy por encima respecto a la disponibilidad de los disminuidos ingresos.
Como resultado, nuevamente se tiene programado un nivel de déficit (9,7 % del PIB), lo que implicará un incremento significativo de la deuda pública, señala y alerta que la situación fiscal del país está llegando a una situación límite, con claras señales de insostenibilidad.
Recuerda que las proyecciones macroeconómicas, del gobierno, para este 2021 fija un presupuesto de 228.357 millones de bolivianos, un crecimiento ajustado del Producto Interno Bruto (PIB) de 4,4 %, un PIB de 284.255 millones de bolivianos ($us 41.437 millones), un déficit de 27.027 millones de bolivianos, equivalente a 9,7 % del PIB y una inflación de 2,6 %.
Ingresos
por impuestos
Los ingresos por impuestos (recaudados por el Nivel Central), que tenían un comportamiento creciente hasta la gestión 2015, registran en adelante una disminución y estancamiento, en el marco del contexto de desaceleración de la economía de los últimos años.
No se tienen datos de las recaudaciones del año 2020, solamente del presupuesto inicial, que no registraba todavía la caída adicional de ingresos debido a la crisis del coronavirus.
En cambio, el presupuesto 2021 registra este efecto de la caída de ingresos, incluyendo la del año pasado. Los ingresos por impuestos previstos para el 2021 presentan una reducción de más de 20 %, en comparación con años anteriores.
INGRESOS POR
HIDROCARBUROS
Los ingresos por hidrocarburos provenientes del IDH (Impuesto Directo a los Hidrocarburos) y las regalías disminuyeron a partir del año 2015, hasta un nivel bastante por debajo de lo alcanzado en los últimos años de la bonanza (2013–2014); principalmente por la caída de los precios internacionales de hidrocarburos, y también debido a la disminución de los volúmenes de producción y exportación.
Para el año 2021 se ha previsto una recaudación de 9.850 millones de bolivianos, similar al promedio de los últimos años, pero bastante menor a lo registrado al periodo de la bonanza; sin embargo, los primeros meses de esta gestión se ha registrado un incremento de los precios internacionales del barril de petróleo, lo que, dependiendo de otros factores, podría significar una leve mejora en la recaudación de la gestión 2021, en un escenario general negativo del sector.
Presupuesto de
gobiernos
subnacionales
Los recursos de gobernaciones, que registraron una notable disminución entre 2014 y 2016, principalmente como efecto de la caída de los ingresos por hidrocarburos, nuevamente presentan una baja.
Por otra parte, con relación a los presupuestos de los gobiernos municipales, que dependen en mayor grado de las recaudaciones de impuestos y coparticipación, estos registrarían una disminución de alrededor de 20 % entre el Presupuesto 2019 y el Presupuesto 2021 (no se comparó con relación al presupuesto 2020, puesto que no refleja los efectos de la caída de ingresos por la crisis del coronavirus).