Es decir que la Administración Tributaria recaudó 8.242,6 millones de bolivianos por concepto del IVA, cuando la meta de recaudación de este impuesto era de 7.670,9 millones, en los primeros diez meses de este año.
En el caso del IT, la meta de recaudación era de 3.413,7 millones de bolivianos, pero gracias a la gestión del SIN se logró cobrar 4.061,9 millones, entre enero y octubre de 2021.
El IVA grava las operaciones de compra y venta de bienes y la prestación de servicios, mientras que el IT se aplica a cualquier persona que tiene un ingreso; de manera que el incremento de la recaudación de ambos tributos expresa el dinamismo y el crecimiento de la economía.
En cuanto al conjunto de la recaudación de Mercado Interno (MI), el SIN tenía la meta de cobrar 22.232 millones de bolivianos, entre enero y octubre de 2021; sin embargo, obtuvo una recaudación de 22.735,7 millones; es decir, un 2,3 % más de la proyección.
La meta de recaudación de Facilidades de Pago y Conceptos Varios (FP y CV) era de 2.119,7 millones de bolivianos y el SIN logró cobrar 2.414,3 millones.
También superó en un 1 % la meta de recaudación del Impuesto a los Consumos Específicos (ICE), que era de 1.377,7 millones de bolivianos, porque cobró 1.391,8 millones.
El año pasado, los pagos tributarios fueron diferidos debido a la pandemia, que provocó la paralización de la economía, es por ello que el Gobierno no contaba con recursos para ejecutar obras.
Tuvo que reducir ministerios y la paralización de proyectos a nivel nacional, ya que la pandemia obligó a destinar recursos para la atención de la población, ante la falta de infraestructura sanitaria.
La actual administración de Estado suspendió los diferimientos de los tributos y empezó a cobrar todos los impuestos a los contribuyentes.