La decisión de acudir a la Devolución de Aportes es voluntaria y se puede reponer el monto retirado en cualquier momento señala una nota de prensa del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas.
El ministro de Economía, Marcelo Montenegro, en entrevista con un medio televisivo, explicó que las personas que accedan al retiro voluntario total o parcial de los aportes de las AFP, tendrán que devolver los recursos con rendimientos (intereses) antes de jubilarse, si no quieren que su fracción solidaria sea afectada, informa la agencia ANF.
Pero aclaró que no será obligatorio devolver el dinero que retiren de las AFP, pero tienen que saber que el monto reducirá su monto de jubilación, lo cual no significa que perderán ese beneficio.
Voluntario
EL Ministerio de Economía realiza esa aclaración ante declaraciones de personas que buscan desinformar a la población, cuando aseguran que el Gobierno es supuestamente irresponsable al coartar el derecho de acceso a la Seguridad Social de Largo Plazo, buscando perjudicar a los Asegurados al Sistema Integral de Pensiones (SIP).
Sin embargo, los expertos en el tema señalan que la ley solo deja a su suerte a las personas, ya que no será fácil la devolución de los aportes más el interés, pero si la intención es inyectar recursos o ayudar a las personas que perdieron su trabajo y no cuentan con dinero, el Estado debería haber elaborado políticas para transferir plata a este sector vulnerable, como los bonos.
La Comisión Económica para América Latina (Cepal), en su último informe sobre el crecimiento de la economía regional, sugirió que los países no deberían mantener las ayudas sociales a la población mientras pase la pandemia.
La Devolución de Aportes no es una medida imperativa ni obligatoria. La ley promulgada por el presidente Luis Arce establece que es de carácter excepcional, por única vez, y que puede ser solicitada de forma voluntaria, por lo que cada asegurado debe analizar su situación financiera y, solo en el caso de ser necesario, requerir el mismo.
La medida ya se aplicó en países como Chile y Perú, que sus AFP tienen intereses mucho más altos que el de Bolivia.
La ley fue un proyecto requerido y solicitado en distintas oportunidades por trabajadores, aglutinados en diversas agrupaciones ciudadanas, que buscaban obtener un ingreso ante la crisis que vive el país por la pandemia, además se cumplió una promesa electoral del actual Gobierno.
Desde el inicio del proyecto, el Gobierno actuó de forma responsable al expresar los riesgos que generarían el solicitar la Devolución de Aportes, tanto para Asegurados aportantes (activos) y jubilados (pasivos), mismos que se pusieron en conocimiento de los sectores movilizados, la Asamblea Legislativa y la población en general.
Sin embargo, ante la amplia demanda para esta medida, se efectuó un análisis técnico responsable que permite viabilizar este requerimiento, atendiendo esta ansiada petición y garantizando la sostenibilidad del Sistema de Pensiones, asegura el Ministerio de Economía.
La ley establece un mecanismo de devolución sobre el total de los recursos que se acumularon en la Cuenta Personal Previsional (CPP) de cada potencial beneficiario a una determinada fecha de corte, por lo que, señalar que se debe reducir la cantidad de aportes, es un criterio completamente subjetivo.
Considerando que la Devolución de Aportes solicitada por el Asegurado es un beneficio traído al presente, de una prestación futura, no puede estar en las mismas condiciones que aquel trabajador que no solicitó, ya que se estaría beneficiando a uno y perjudicando a otro, entonces necesariamente tienen que estar en igualdad de condiciones.
Los Aportantes al SIP dependientes e independientes (que actualmente alcanzan alrededor de 800 mil) contribuyen al Fondo Solidario que va a beneficiar a los Asegurados que lo requieran, por tanto, ninguna persona puede atribuirse la propiedad del mismo, aludiendo que le corresponde una porción especifica.