Las reservas continúan mermando y la prohibición de exportar algunos alimentos sólo profundiza la sequía de divisas, y a pesar de que los precios de los commodities pasan por un buen momento, el país no puede aprovechar como lo hizo en 2013 y 2014.
Los minerales todavía sacan cara en las exportaciones, y en segundo lugar están los no tradicionales por encima de los hidrocarburos, pero los soyeros, y ahora los productores de maíz y sorgo sienten las medidas implementadas por el Gobierno y no podrán aprovechar los buenos precios de los alimentos en el mercado internacional.
El Gobierno asegura que la determinación de implementar certificación de abastecimiento a precio justo obedece a la seguridad alimentaria para la población.
En su twitter, el economista Gabriel Espinoza informa que “al 24/02/2022, las RIN cayeron a 4.455 MM de $us, de los cuales el 27% son divisas (1.223 MM de $us), 12% son DEG’s (559 MM) y 60% oro (2.635 MM). El incremento del oro se debe a un aumento de la valoración por el precio. Las importaciones mensuales promedio son 800 MM de $us”.
Entre tanto, otro twitter del economista Napoleón Pacheco muestra una gráfica de la caída de las reservas y cómo el oro saca cara por las RIN, pero coyunturalmente por el alza del valor en el mercado internacional.
Diferentes expertos en el tema indicaron que la baja producción de gas mermo la renta petrolera, que repercutiría en los presupuestos de gobernaciones, municipios y universidades, sin embargo, Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) en una nota de prensa informó que los ingresos llegarán a más de 2.900 millones de dólares para la presente gestión.