Destinos Seguros involucra a sectores del ámbito público y privado del área de turismo, organizaciones de la sociedad civil y población en general, quienes cumplen un proceso de capacitación con el sistema “The Code” con el fin de certificarse como sitios turísticos seguros contra la explotación sexual de NNA.
El proyecto cuenta con el apoyo de Caritas Suiza en Bolivia, ICCO Cooperación, Fundación María Marina, Defence For Children Holanda y Pan Para El Mundo.
El pasado jueves 23 de septiembre, en las instalaciones de la Terminal de buses de La Paz (plaza Antofagasta), fueron presentados los avances del proyecto y sus proyecciones para 2021. El mismo espera cerrar el año con 40 empresas certificadas, más de 700 personas sensibilizadas; entre funcionarios públicos, privados y la comunidad. A la par de concluir el proceso de certificación de Rurrenabaque (Beni) y Caranavi (La Paz); y a partir de octubre, iniciar el proceso con Uyuni, en Potosí.
La primera certificación como un Destino Seguro la obtuvo Tiwanaku (La Paz) en 2019. Este reconocimiento contó con el apoyo y participación de autoridades locales, la comunidad y el Viceministerio de Turismo. En el proceso se capacitó a 200 funcionarios públicos y 150 operadores.
“Para certificar un destino turístico, se tiene que sensibilizar y capacitar a los actores de la comunidad, al sector privado y al sector público sobre temas de explotación sexual comercial de niñas, niños y adolescentes”, explicó Ariel Ramirez, coordinador nacional del Movimiento Vuela Libre Bolivia.
El proceso de certificación se realiza con una metodología teórico-práctica que incluye una serie de actividades en las que participan los actores involucrados, quienes, desde sus experiencias, promueven acciones para prevenir la explotación sexual comercial de niñas, niños y adolescentes; además del rescate y protección de posibles víctimas.