A raíz del lanzamiento del Plan de Reactivación del Upstream 2021: Nuevas Perspectivas y Oportunidades”, que desarrolló Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), las autoridades nacionales no descartan tratar leyes para reactivar el sector. Los expertos en hidrocarburos recomendaron una nueva normativa para atraer inversiones privadas para la exploración de nuevos yacimientos.
En su Breve análisis y prospectiva de la industria del gas natural boliviano: 1980-2021, Mauricio Medinaceli señala que el escenario del negocio del gas cambió en los últimos años, con la incursión del LNG (Liquid Nature Gas) y los nuevos descubrimientos de reservas en los mercados vecinos, Argentina y Brasil.
Es por ello que Medinaceli sugiere la modificación de la Ley de Hidrocarburos para incentivar la exploración y convertirla en “una ley de siembra” frente a la ley actual, junto con el “ajuste de precios en el mercado interno”.
Por otro lado, está la “creación de un sistema tributario más flexible” con porcentajes tributarios variables y la apertura de áreas de adjudicación para empresas extranjeras en las que existe un sistema de licitación, según una nota de https://riotimesonline.com/brazil-news/.
El experto en hidrocarburos Hugo del Granado expresó, en su momento, que la nacionalización dejó a Bolivia fuera del mapa de los hidrocarburos, y por ello sugirió cambios para atraer inversiones extranjeras y encaminar al país en el centro energético.
También el exsecretario de Hidrocarburos de la Gobernación de Santa Cruz, José Padilla, sugirió una nueva normativa, debido a que la exploración requiere de 8.000 millones de dólares anuales, mientras YPFB destina una suma muy baja.
La Fundación Jubileo planteó, hace años atrás, una nueva normativa, ya que los parques que se le hace a la actual ley en vez de ayudar complica la aplicación de la misma.
La diputada Lidia Tupa, presidenta de la Comisión de Economía Plural de la Asamblea Legislativa Plurinacional, considera que tratar una ley en ese órgano, que viabilice las inversiones extranjeras en hidrocarburos, es una oportunidad para reactivar la economía del país, según una nota de prensa de la estatal petrolera.
“Más allá de las posturas, tomamos decisiones en favor de la población. Trabajaremos en políticas a favor de la reactivación económica y lo haremos con la inversión extranjera para que beneficie a los bolivianos”, señaló la legisladora.
El ministro de Hidrocarburos, Franklin Molina, mencionó que son importantes las normativas para asegurar la inversión, en el lanzamiento del plan.
Impacto
Del breve análisis realizado en el documento se puede concluir que la exportación de gas natural, en particular el proyecto Bolivia-Brasil, tuvo un impacto positivo sobre el desempeño del sector hidrocarburos boliviano y la economía en general; y debido a la naturaleza de la inversión realizada en el sector, concentrada en la explotación de campos, y uno de los Government Take más altos de la región, se espera una declinación en la producción futura de gas natural, señala en parte de su resumen del trabajo.
Además, indica que por ese motivo, Bolivia acordó con Brasil y Argentina (2019 y 2020) adendas a los contratos de exportación que disminuyen las obligaciones de entrega y así evitar el pago de multas.
Ante ese escenario, el documento propone algunas medidas para impulsar el sector nuevamente, entre ellas destacan, la Corporativización de YPFB y un sistema impositivo más flexible, señala el autor en su resumen.
Además, puntualiza que hoy en día la posición negociadora de Bolivia frente a Brasil y Argentina es más débil que hace 30 años atrás, ello se debe a varios factores, entre ellos, la decreciente capacidad de producción de gas natural boliviana, importantes descubrimientos de gas en Vaca Muerta y el Pre-Sal y la posibilidad de importar a través de proyectos de LNG.
Problemas
“Si bien los problemas para Bolivia comienzan el año 2015 con la caída de los precios de exportación; estos se agudizan el año 2018, cuando Bolivia no puede enviar (por restricciones en la producción) los volúmenes de gas contractuales y por ello, se tuvo que pagar una multa importante, establecida en el contrato”, señala el documento.
Es por ello que recuerda que en diciembre del año 2019 se firma la octava adenda al contrato donde, entre otras cosas, se modifica el punto de entrega del gas natural y, se disminuyen los volúmenes mínimos de entrega de Bolivia hacia Brasil. Ello se hace con el propósito de no pagar multas futuras porque la producción de gas natural en Bolivia está en declinación, explica.
Ese contrato explica la mitad del crecimiento económico boliviano de los últimos 15 años, ya que gran parte de los ingresos por la exportación de gas natural fueron coparticipados a toda la economía (a través de instrumentos fiscales) y ello permitió incrementar el gasto y la inversión pública tanto a nivel de Gobierno como de las regiones.
Uno de los grandes logros del proyecto de exportación Bolivia – Brasil fue disminuir a casi cero, la quema y venteo del gas natural, puntualiza en su twiter Medinaceli.
Como se recordará, durante los últimos 14 años, la estatal petrolera no logró incrementar la producción de gas mediante el descubrimiento de nuevos yacimientos hidrocarburíferos, los dos fracasos de la anterior gestión está en Boyuibe, en Tarija, y Lliquimuni, en el norte de La Paz.