La ampliación del plazo para la colocación de bonos soberanos en el mercado internacional, que serían destinados a pagar deuda y para el presupuesto nacional, tropieza con dificultades para acceder al financiamiento para sostener el Modelo económico Social Comunitario Productivo, según el blog del analista económico Hugo Balderrama.
La falta de recursos es evidente, y el Gobierno va en busca de recursos al mercado internacional a través de la emisión de bonos, sin éxito todavía, por lo que ampliaron el plazo una semana más, mientras tanto a pesar del incremento del precio del barril de petróleo, Bolivia no puede aprovechar por la caída de la producción, y también por la congelación de los precios con Argentina y los bajos volúmenes de envíos, de acuerdo a expertos en temas en hidrocarburos y económicos.
Varios economistas coinciden en que los recursos buscados en el exterior buscan apoyar el presupuesto del Gobierno, y de no hacerlo podría reducir la burocracia, es decir disminuir personal en la administración pública.
El analista Hugo Balderrama, en su blog, alerta sobre la dificultad de acceder a financiamiento para sostener el Modelo Económico Social Comunitario Productivo Boliviano (MESCPB).
«De manera más concreta, y aunque Jorge Richter (vocero presidencial) dijo: «No es un tema dramático», el Gobierno está teniendo problemas en conseguir los 2.000 millones de dólares que, dicho sea de paso, servirían para financiar los bonos con vencimiento en octubre de 2022, 2023 y 2028 (por un total de 3.000 millones de dólares)», señala.
Mientras el analista en inversiones Mauricio Ríos, en su artículo «Bolivia: Cuenta regresiva para el modelo económico de Arce Catacora» publicado en su blog, coincide con Balderrama, por separado, al indicar, que “el Estado Plurinacional no está logrando emitir bonos soberanos por 2.000 millones de dólares en los mercados internacionales, para financiar los bonos con vencimiento en octubre de 2022, 2023 y 2028…”
“Ya en el primer trimestre de 2021, (…) Arce se propuso emitir bonos soberanos por 3.000 millones de dólares para cubrir el 50 % del Presupuesto General del Estado de la mencionada gestión. Sin embargo, ante su fracaso ni siquiera se trató de culpar a las circunstancias de la pandemia y las restricciones internacionales, sino que se guardó el más estricto silencio posible. Por eso la ejecución presupuestaria del gobierno central fue de apenas el 50 % de lo previsto”, asegura.
NO LOGRAR RECURSOS
Pero también expone la situación en caso de que el Gobierno no logre los recursos en el exterior, en primera instancia estaría expuesta el fracaso del modelo económico, que tenía como base el gasto público y el mercado externo, y asumir medidas “dolorosas” que no dan margen para el gradualismo.
“…estos ajustes se resumen en recortar el gasto público de manera decidida y sin prolongar más la agonía: reducir personal público burocrático no solo del nivel central en La Paz, sino en gobernaciones y municipios de todo el país, pero sobre todo liquidar la gran mayoría de empresas públicas que operan a pérdida desde su nacimiento, y que son las que explican el grueso del abultado déficit fiscal”, advierte.
En su actualización la calificadora de riesgos Standard & Poor’s (S&P), reiteró su preocupación por la acumulación permanente del déficit y la deuda, además del bajo nivel de reservas del Banco Central de Bolivia (BCB), pero además añadió el deterioro de la capacidad de producción de hidrocarburos.
En un artículo de opinión el precio del petróleo pasó los $us 95/barril ¿por qué no festejamos?, publicado en paginasiete, Mauricio Medinaceli explica que cuando los precios estaban altos en 2014 y había una producción de al menos 61 millones de metros cúbicos día (MMmcd), los ingresos se incrementaron, pero la caída de la producción y de los envíos, hicieron que los recursos se reduzcan.
CALIFICACIÓN
Entre tanto, Ríos sostiene que el incremento sostenido de los precios internacionales del petróleo todavía favorece las cuentas fiscales del país, aunque con muy poco margen y no por mucho tiempo más, al punto en que la calificadora S&P también ha advertido que el país podría sufrir una rebaja de calificación entre los próximos seis a 12 meses, y estima un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de 3,6 %.
Por su parte, Roberto Laserna, economista, escribió en su @roblaser que los bonos bolivianos en mercados internacionales: si hubiéramos mantenido calificación BB, habríamos ganado 2.47 puntos porcentuales. Para bonos por 2 mil millones, eso representa 49 millones anuales, y en 10 años el costo total se hace 490 millones.
“Esa rebaja en calificación se debe sobre todo a inseguridad jurídica (mala justicia), déficit fiscal (exceso de gastos), ineficiencia pública (inversiones inútiles y dispendiosas)”, asegura.
Oficial
El Modelo Económico Social Comunitario Productivo sí funciona, ha dado los resultados esperados en cuanto a la implementación de la inversión pública, para lograr mayor crecimiento económico y distribución del ingreso para disminuir la pobreza, dijo el ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, tras su interpelación realizada el miércoles 16 de febrero respecto a la situación de la economía del país, políticas públicas, y la reactivación de la economía boliviana.
Entre las principales medidas aplicadas para redistribuir los ingresos señaló, por ejemplo, las transferencias condicionadas como el Bono Juancito Pinto, la Renta Dignidad, el pago del Bono Juana Azurduy, la Tarifa Dignidad, el Subsidio Universal Prenatal por la Vida, el Complemento Nutricional para el Adulto Mayor y la política salarial.
De igual forma, el Ministro explicó que en el período 1985 y 2005 el Producto Interno Bruto (PIB) creció en un promedio de 30 %, mientras que entre 2006 y 2019 el PIB creció en promedio en 4,7 % gracias a la aplicación del modelo gestado por profesionales bolivianos.
Indicadores sociales
En cuanto a los indicadores sociales, detalló que en 2005 un 38,2 % de la población se encontraba en situación de pobreza extrema y en 2021 este indicador disminuyó a 11,1 %, mientras que la pobreza moderada se redujo de 60,6 % a 36,3 % durante el período señalado.