El Gobierno evalúa la venta de energía eléctrica a Chile y Perú y avanza en la consolidación de exportación a Brasil y Argentina, de acuerdo con la Rendición de Cuentas del Ministerio de Hidrocarburos y Energía, realizada el día de ayer.
La autoridad informó que para el 2023 se espera concluir con la implementación de una planta de generación en Santa Cruz de, aproximadamente, 100 mega wats, con el cual se pretende exportar energía a Brasil; mientras que para la presente gestión se anuncia la venta de energía a Argentina, ya que se concluirá la línea de transmisión de 74,5 kilómetros, que llevará 120 MW.
Entre tanto, la declaración conjunta del VI Gabinete Ministerial Binacional Bolivia – Perú establece emprender acciones para el suministro de energía eléctrica a poblaciones rurales fronterizas; mientras tanto, autoridades de Chile y Bolivia acordaron, el pasado 29 de diciembre de 2021, realizar estudio de alternativas de interconexión eléctrica.
Acuerdos con Perú
Molina destacó los acuerdos suscritos durante el VI Gabinete Binacional Bolivia – Perú, que se llevó a cabo en noviembre del año pasado. Este evento encamina la integración energética mediante acuerdos que proyectan la exportación de gas licuado de petróleo (GLP), gas natural licuado (GNL), la instalación de redes de gas y la promoción y comercialización de la urea boliviana en el mercado del vecino país.
Electricidad
En cuanto al sector eléctrico, el Ministro de Hidrocarburos y Energías informó que la pasada gestión se destinaron 3.443 millones de inversión para reactivar y concluir proyectos de generación eléctrica, transmisión y electrificación en el país.
La autoridad informó la inversión permitió ampliar la cobertura eléctrica en el país, que llegó en 2021 al 94,6 % de los hogares bolivianos, tanto en áreas urbanas como rurales
Energía
alternativa
Además, también se destinó recursos para concluir la segunda fase de la Planta Solar Fotovoltaica de Oruro, para agregar 50 megavatios (MW) al Sistema Interconectado Nacional (SIN), y los parques eólicos de Warnes, San Julián y El Dorado (Santa Cruz), que generan 108 MW de energía eléctrica limpia y renovable.
Los cuatro proyectos requirieron una inversión total de 1.807 millones de bolivianos, informó la autoridad.
En 2021 se reactivaron los proyectos de ciclos combinados en las termoeléctricas de Warnes, que con una inversión de 212 millones de bolivianos se adicionó 129 MW de potencia para alcanzar una capacidad instalada de 320 MW; Entre Ríos, que requirió 193,7 millones, agrega 137,5 MW y se espera llegar a 360 MW de potencia; y Del Sur, que con 96 millones de inversión, incorporó 258 MW para sumar un total de 320 MW.
Respecto a obras de transmisión, el titular de Hidrocarburos y Energías destacó, entre otras obras, la construcción de la “Línea de Transmisión Eléctrica 500 kilovoltios (kV) Carrasco – Santivañez y Subestaciones Asociadas”, que tiene una longitud de 235,4 kilómetros. Esta línea se constituirá en la primera línea de extra alta tensión en el país y su conclusión está prevista para el primer semestre de este año.
También resaltó la reanudación del proyecto “Juana Azurduy de Padilla 132 kV Bolivia – Argentina, que permitirá al Estado exportar hasta 120 MW al vecino país desde este año.
Nuevos
proyectos
eléctricos
Asimismo, durante su exposición, el ministro Molina informó que están en avance los proyectos eólicos La Ventolera y Warnes II, que agregarán 24 MW y 21 MW respectivamente y cuyas culminaciones están previstas para 2024.
En cuanto a energía hidroeléctrica, el Gobierno reanudó el año pasado las obras del proyecto Ivirizu, que se estima que desde 2023 agregue 290 MW de potencia, y del proyecto Miguillas, que para 2024 aportará 204 MW de potencia.
Entretanto, la autoridad indicó que el año pasado se retomó el proyecto de generación eléctrica con energía geotérmica, y que para este 2022 se estima concluir la Planta Piloto Geotérmica Laguna Colorada, que producirá 5 MW mediante esta fuente renovable.