Ambos asambleístas midieron criterios en el programa “Hagamos Democracia” de la red Erbol, donde analizaron la situación política en el país, a propósito de la abrogada Ley 1386 y la Ley 1407 del Plan de Desarrollo Económico y Social (PDES) 2021-2025 que enfrenta al Gobierno con las regiones y sectores opositores.

“Yo insisto en que este modelo es inviable y esto tenemos que hacerle entender a la gente porque desde el 2014 el modelo se sustenta con deuda, o sea, toda esta generación loca de empresas estatales deficitarias en general y, además, devastadoras de la naturaleza como Easba, Planta de Urea y la hidroeléctricas del Chepete-El Bala son parte del modelo. Estamos ultra endeudados, este modelo se basa en la devastación de la naturaleza, porque la exportación de materias primas es el mismo modelo que viene desde la colonia y que siempre ha generado pobreza”, manifestó.

Requena invitó a mirar la situación de Potosí y Oruro o Guanay donde no queda nada después del extractivismo. “Santa Cruz también está siendo igualmente devastada en sus bosques que han sido incendiados para aumentar la exportación de commodities. Entonces (el modelo) es pan de hoy y hambre para mañana”, manifestó.

Aseveró que este modelo no solo se basa en un “hipercentralización, hiperestatismo, hiperautoritarismo”, en un control desmedido de la sociedad, sino que también se basa en la destrucción de la naturaleza para aumentar el PIB, que cuando crece el PIB es porque la naturaleza se devasta.

Cree que el “fallido modelo” también contribuyó al cambio climático, no bajó la pobreza multidimensional que demuestra que “estamos muy mal pese a semejante bonanza nunca antes vista en el país”. Dijo que Bolivia tiene que tener otro modelo de desarrollo con visión del siglo XXI en base a la economía de la naturaleza y el turismo.

Sostuvo que el 2006 el MAS recibió el país con las cuentas saneadas, cero endeudamientos externos y aseveró que la danza de cifras que lanza el Gobierno no explica que la etapa extraordinaria de precios internacionales vino de los países del sistema capitalista.

Jerges Mercado entiende que en este momento hay una confabulación política, porque si el Gobierno es exitoso los opositores no tendrán opción de volver al poder y por ello identifica una “confabulación interna y externa para el control de los energéticos del siglo XXI”. Ponderó el discurso democrático de Comunidad Ciudadana y criticó a Creemos por considerarlo “los más fascistas dispuestos a tomar el poder por asalto”.

Sostuvo que el MAS es un partido democrático que no se queda en el voto, sino que busca que la riqueza se distribuya entre todos los ciudadanos, con la participación de mujeres y jóvenes para que la riqueza no se concentre en pocas manos.

Explicó que, en el modelo económico anterior, cuando uno prendía luz, la factura se iba a España, Chile o Estados Unidos; y cuando uno utilizaba el teléfono la plata se iba a Italia porque el dueño de la telefónica era un italiano; y la factura del agua en Cochabamba era para los franceses. Dijo que ese era el modelo donde Carlos Mesa hizo plata haciendo publicidad de la privatización de las empresas estratégicas a precio de “gallina muerta”.

En relación al boom de las materias primas, sostuvo que, si bien es cierto el auge de los precios, también es evidente que, si no había nacionalización de los hidrocarburos, las ganancias se iban a manos de las empresas extranjeras; se exportaba la riqueza y se nacionalizaba la pobreza, respondió.

Recordó que ese excedente llegó a las universidades, a los pueblos indígenas, a las gobernaciones y a los municipios; “por eso es que tuvimos abundancia en Bolivia. No solamente fueron los precios intencionales, sino que la producción hidrocarburífera subió de 30 millones de metros cúbicos/año a 62 millones, teniendo un crecimiento de base ancha con políticas públicas que permitieron salir de la pobreza a muchas personas”.

Dijo que por ese motivo se quiere seguir avanzando con el actual modelo que “no es extractivista porque está planteando la sustitución de importaciones, continuar con la industrialización del gas, exportar el hierro del mutún, exportar energía eléctrica, hacer una industria farmacéutica y de vidrios”, replicó sin darse pausa en sus argumentos.(Erbol)