En su momento, el investigador y docente de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), Lucio Tito, señaló que el proyecto tenía la intención de asegurar la provisión de materia prima para la planta, con siembra de caña no sólo en la región sino también en la parte del Beni.
De esa manera se podría haber asegurado la materia prima para la planta de Easba, pero las autoridades de entonces no dejaron que la iniciativa avance, y presionaron para que la siembra sólo sea en la región de San Buenaventura, departamento de La Paz.
En agosto, se informó que ganaderos del municipio de Reyes, Beni, producen caña de azúcar para la empresa de San Buenaventura, con el objetivo de diversificar su producción.
Aseguraron de que se trata de un muy buen negocio, puesto que la propia empresa azucarera estatal se encarga de todo el proceso productivo y del transporte de la caña desde Reyes hasta el ingenio.
Esa información se recoge de un reporte del periodista José Antonio Gómez de radio Ritmo de Reyes para el ciclo de programas “Amazonía en la mira” del Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (Cedla), realizado en colaboración con seis radios de la red Amazónica y difundido por la red ERBOL.
Según esos productores, Reyes tiene características “únicas” que lo diferencian de San Buenaventura.
“Primero, llueve menos, tenemos 1.700 mm, allá tienen 2.200 mm. Nuestro año agrícola es más largo, tenemos cinco meses de año agrícola. En San Buenaventura tienen dos meses y medio de año agrícola, sembrando aquí podríamos ampliar meses la zafra allá. Segundo, en San Buenaventura es muy cara la siembra [
]. Allá cuesta 4.800 dólares, aproximadamente, la siembra de una hectárea de caña, por el desmonte, y aquí está en 1.000, 1.200. Con lo que se hace una hectárea allá, aquí se pueden hacer cinco”, señala un productor que se dedica a esto hace 2 años.
No son rentables
Para Robison tanto la producción de caña como la producción industrial de azúcar en San Buenaventura no son rentables, por ello, en su investigación, sostiene que ambas solo podrán tener continuidad con enormes subsidios.
Tomando en cuenta que una de las salidas surgidas desde la planta ejecutiva de Easba contempla la producción de caña de azúcar en el Beni aduciendo menores costos de producción, este autor plantea que “sería mucha ironía que el ingenio, que fue ‘un regalo para el departamento de La Paz’, continúe operando con gran pérdida, como siempre, pero subvencionando a ganaderos del Beni”. (EL DIARIO; ANF y Erbol)