La mercadería decomisada esta valuada en aproximadamente 200.000 bolivianos. Un informe de la entidad sanitaria, indica que entre los productos comisados, se tuvo 3,9 toneladas de pescado; 1,3 toneladas de carne y derivados; 1,5 toneladas de frutas; una tonelada de balanceado para mascotas; una tonelada de bebidas alcohólicas entre vinos y cerveza y 3,3 toneladas en alimentos varios, como aceites, harina, avena, leche en polvo, durazno en lata, galletas y alfajores, que posteriormente fueron destruidos en el vertedero de “Abapó”.
El jefe de Gabinete del Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras, Fernando Villarroel, dio a conocer que estas acciones fueron un trabajo organizado para controlar el ingreso, regular e irregular, de alimentos a territorio nacional.
“Hemos podido ver una gran afluencia de flotas y vehículos a los que, en la inspección realizada, se les comisó bastante cantidad de producto alimenticio que querían hacer ingresar sin cumplir con las normativas”, expresó la autoridad.
“Esta operación contribuye grandemente a la economía formal del país porque aminora el contrabando. Vamos a exhortar a los servidores públicos del Senasag a que sigan realizando esta efectiva labor en los puestos de control”, acotó Villarroel.
A su turno, el director Departamental del Senasag en Santa Cruz, Marco Antonio Tapia, manifestó que la entidad trabaja coadyuvando en la lucha contra el contrabando en beneficio de la población, protegiendo el estatus sanitario y velando por la inocuidad de los alimentos para que los ciudadanos tengan la seguridad y la certeza de que van a consumir un producto de calidad, que cuente con la autorización y registro sanitario.