Al mes de mayo de 2021, la cancelación de matrícula de comercio en Fundempresa llegó a 2.696 empresas, cuando en similar período de 2020 cerraron 669 empresas, un incremento de 303 %, debido a la situación de la economía nacional, provocada por la pandemia del covid-19, reporta el Monitor Macroeconómico de la Cámara Nacional de Industria.
“El incremento en 303 % en el cierre de la matrícula de comercio en Fundempresa, entre otros factores coyunturales, se debe en general al descenso en el nivel de actividad económica a consecuencia del impacto sanitario del covid-19”, señala el documento.
Los economistas así como los empresarios indicaron en su momento que si bien las cifras macroeconómicas son positivas, debido a los factores externos, en el campo de la microeconomía la situación era todo lo contrario, ya que la demanda aún no se reactiva y por consiguiente tampoco la oferta, y muchas empresas todavía tienen problemas económicos.
La pandemia obligó a las autoridades públicas locales, nacionales e internacionales a aprobar sistemas de cuarentena rígida y flexible, que restringieron las actividades de producción, comercialización y distribución de bienes y servicios.
La pandemia afectó al nivel de ingresos tanto de empresas como de familias, esto es, descendió en forma crítica el flujo de caja de las empresas -la liquidez- y continuaron las obligaciones tanto laborales, tributarias, crediticias, a la seguridad social, etc.
En su momento, el economista José Gabriel Espinoza y el docente de la Universidad Técnica de Oruro (UTO), Ernesto Bernal, por separado, indicaron que el comportamiento del consumidor cambió, y ahora prioriza sus compras, en especial van dirigidas a alimentos e insumos médicos.
En ese contexto, las empresas optaron por cerrar actividades. Alrededor del 80 % de las empresas que cierran matrícula de comercio son unipersonales y dedicadas al sector comercio, servicios profesionales y transportes, lo cual significa que son empresas que no generan altos niveles de empleo formal, su aporte tributario es reducido y su nivel de innovación y tecnología es escaso o marginal, señala el análisis de la CNI.
Las empresas unipersonales en su mayoría tienen un ciclo de vida de apertura y cierre en menos de dos años, son empresas que no tienen un ciclo de vida sostenible, es decir, apertura, desarrollo, expansión, crecimiento y desarrollo.
El covid-19 generó apertura de empresas de ciclo de vida corto. Son empresas por necesidad y no por oportunidad y por desarrollo de negocios. Tanto la apertura de empresas como el cierre de las mismas se concentran y están vinculadas a procesos de «necesidad», en el sector terciario (comercio y servicios) y de ciclo de vida corto, explican.
Son escasas las empresas en el sector secundario -industria-, tipo sociedad anónima, que se crean en el país, las cuales son el fundamento del crecimiento y desarrollo y formalidad económica.
Es fundamental que El Estado genere las condiciones fiscales, tributarias, laborales y de seguridad jurídica para que surjan empresas sostenibles, en el sector secundario de la economía.
La inflación acumulada a mayo de 2021 alcanzó a 0,28 %, cuando en similar periodo de 2020 llegó a 0,42 %. En los tres últimos meses de 2021 se registró inflación mensual negativa (deflación) que evidencia la caída de la demanda por los problemas de ingresos y liquidez que enfrentan las empresas y familias por efecto del covid -19.
En junio de 2021, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró una variación positiva de 0,01 % respecto a mayo. La variación acumulada a junio fue positiva de 0,29 % y a doce meses alcanzó variación positiva de 0,19 %.
Entretanto, el superávit comercial a mayo de 2021 se situó en 638 millones de dólares, diferente al déficit comercial de 28 millones de mayo de 2020. El superávit en 2021 es producto del efecto combinado precio y volumen positivos en el mercado externo de tres rubros de exportación: minerales metálicos, derivados de hidrocarburos y productos oleaginosos.
En los primeros cinco meses de 2021, la deuda externa subió a 12.525 millones de dólares, 2,9 % más que a fines de 2020. La deuda externa actual representa el 30,2 % del PIB proyectado para 2021.
Mientras tanto, el desempleo a abril de 2021 descendió a 7,6 %, cuando a fines de 2020 se ubicó en 8,23 %. Por la pandemia, la mano de obra se relocaliza del sector formal al sector informal, lo cual genera un descenso del desempleo.