Informó que en la gestión 2021, como resultado de la siembra de las campañas agrícolas de verano 2020-2021 y de invierno 2021, la producción total de soya, maíz, sorgo, girasol, trigo y chía, ha sido de 4.744.000 toneladas, que representa una disminución de un 6 % con relación a la gestión 2020.
Aclaró que esta disminución en la producción se ha debido a que los agricultores en la campaña de invierno 2021, fueron afectados con una sequía prolongada y fríos intensos con heladas que ocasionaron pérdidas productivas considerables, principalmente en los cultivos de sorgo y maíz, que fueron los más afectados.
Acotó que en la campaña de verano 2020-2021, se tuvieron condiciones climáticas favorables que permitieron un aumento importante en la producción de grano de soya y en los ingresos por la coyuntura favorable de precios en el mercado internacional, que permitieron afrontar las perdidas productivas y económicas que posteriormente, se dieron en la campaña de invierno
Indicó qué comparando por ciclos de producción, en la campaña de verano 2020-2021, en los cultivos de soya, maíz y sorgo, se produjo 3.102.000 toneladas, que significan un incremento de 22 % con relación al verano anterior; y en la campaña de invierno 2021, apenas se logró producir 1.642.000 toneladas de granos de soya, trigo, girasol, maíz, chia y sorgo, con una disminución de 37 % con relación al invierno anterior.
Señaló que la producción total de granos en 2021, representó un movimiento económico de al menos 1.600 millones de dólares, que fueron distribuidos en toda la cadena productiva de alimentos, y representó un incremento de 38 % con relación a 2020.
Expresó que las exportaciones de oleaginosas, de acuerdo a datos del INE, al mes de octubre de 2021, ha sido de 1.244 millones de dólares, que representan un aumento de 38 % con relación a 2020.
Dijo que como sector productivo se encuentran estancados en la superficie de siembra, en los últimos años, con 2.300.000 hectáreas, y no se observó un crecimiento significativo en las dos campañas agrícolas, por lo que se descarta cualquier ampliación de la frontera agrícola.
Comentó que lamentablemente no se ha podido establecer una agenda productiva con el Gobierno Nacional para solucionar los principales problemas del sector agro-productivo, a pesar del potencial existente para aumentar la producción de alimentos, generar mayores excedentes para las exportaciones y con ello aumentar el ingreso de divisas para el país, y de esta manera contribuir a la reactivación económica.
Consideró que es importante que el Gobierno Nacional atienda la demanda del sector productivo con el acceso a la biotecnología con nuevos eventos de semilla genéticamente mejorada en los cultivos de soya y maíz, principalmente, una lucha efectiva contra el contrabando que viene haciendo una competencia desleal a los productores bolivianos, la implementación de Puerto Busch para mejorar la logística de exportación y, por supuesto, garantizar la seguridad jurídica para las tierras productivas.