Fabian Freire

Voy a enfocarme en dos momentos hist贸ricos de nuestra historia reciente, en los cuales, al igual que hoy, hemos estado al borde de la hecatombe total y hemos podido superar las adversidades y salvar a Bolivia. Todo esto, sin dudas, gracias a la unidad de actores importantes en el momento adecuado, dejando de lado diferencias y favoreciendo los intereses nacionales.
El primer momento hist贸rico del cual hablaremos es la llegada del general Juan Jos茅 Torres al poder y la instauraci贸n de un r茅gimen radical que estuvo a nada de destruir la naci贸n. Torres lleg贸 al poder a trav茅s de un golpe de Estado, fue respaldado por sindicatos, universitarios y muchos sectores de la poblaci贸n. Desde el d铆a uno, Torres fue sometido por la COB y partidos de extrema izquierda, quienes terminaron siendo los que dictaban las decisiones de peso en el gobierno. Durante la gesti贸n de Torres, se instaur贸 la 鈥淎samblea Popular鈥�, que buscaba reemplazar al Poder Legislativo, cerrado en ese momento. Esta asamblea ten铆a un funcionamiento similar a los 鈥渟oviets鈥�, que fueron el pilar del r茅gimen comunista sovi茅tico.
En otras palabras, la instauraci贸n de la Asamblea Popular signific贸 la llegada del comunismo a Bolivia. De haber seguido funcionando, que no haya dudas de que hubiera destruido a nuestro pa铆s por completo. Con Torres sometido y sin mando en el gobierno, la izquierda radical tuvo la oportunidad perfecta para destrozar a Bolivia, y lo fue haciendo hasta agosto de 1971, cuando el general Hugo Banzer, con ayuda de otros actores, lider贸 un levantamiento que permiti贸 frenar al comunismo.
La unidad que nos llama la atenci贸n es la que hicieron la Falange y el MNR, dos partidos nacionalistas que, por caprichos de la historia, terminaron siendo rivales ac茅rrimos. Ambos partidos fueron los grandes animadores de la pol铆tica nacional durante d茅cadas, teniendo un peso de gran relevancia en el pa铆s. Falange, junto a sectores militares, al ver la situaci贸n l铆mite en la cual estaba el pa铆s, empez贸 a planear un alzamiento popular para salvar Bolivia. En medio de los preparativos, el jefe de ese momento de Falange, Mario Guti茅rrez, invit贸 a V铆ctor Paz y al MNR a sumarse a la naciente operaci贸n. Ambos partidos 鈥渄ejaron sus ri帽as鈥� y se unieron junto a los militares para salvar a Bolivia de la hecatombe definitiva, sellando su triunfo con el derrocamiento de Torres y la destrucci贸n de la nefasta Asamblea Popular. Si bien despu茅s el gobierno entrante cometer铆a una gran cantidad de errores y acciones cuestionables, nada quita que Falange y el MNR, en su rol de los dos partidos m谩s importantes de Bolivia, se unieron sobre la base del fin definitivo, que era salvar a Bolivia del comunismo. Hasta el d铆a de hoy debemos estar agradecidos por dicha acci贸n, que evit贸 la destrucci贸n de la patria.
El segundo momento de unidad clave fue el 鈥淧acto de la Democracia鈥� entre el MNR y ADN para afrontar la crisis de los ochenta. V铆ctor Paz no dijo mentiras cuando afirm贸 que, si no se tomaban medidas extremas, Bolivia iba a 鈥渕orir鈥�. El pacto por la democracia le dio gobernabilidad al gobierno entrante y le permiti贸 tener un margen de acci贸n notable ante la crisis, para de esta forma lograr la recuperaci贸n econ贸mica y poner fin a la inflaci贸n. El costo social fue, sin dudas, grande, pero no hab铆a alternativa. De nuevo, los dos partidos m谩s importantes del momento se unieron para salvar al pa铆s.
En la actualidad, no contamos ni siquiera con partidos pol铆ticos de oposici贸n relevantes, estamos ante una situaci贸n nefasta. Hay muy pocos actores que podr铆an funcionar para realizar una unidad apta que pueda vencer al MAS y tener 茅xito en una futura gesti贸n. Es una 茅poca complicada y de desaf铆os. Debemos mostrar, una vez m谩s, como bolivianos, que seremos capaces de derrotar las adversidades. La unidad se debe hacer con actores que s铆 aporten y tengan una visi贸n de pa铆s clara, no con tibios, funcionales o simpatizantes de la izquierda.