El Viceministro de Lucha Contra el Contrabando y la Cámara Nacional de Industrias (CNI) acuerdan intensificar campaña contra el comercio ilegal de cigarrillos, que pone en riesgo 20.000 fuentes de trabajos indirectos, 500 empleos directos y la supervivencia de 800 familias productoras.

El asesor económico de la CNI, Hugo Siles, en su presentación sobre la afectación del contrabando a la industria nacional, indicó que el comercio ilegal de cigarrillos representa 18% del mercado y una evasión impositiva de 65 millones de bolivianos, que dejan de pagar al Estado.

Mientras el viceministro de Lucha Contra el Contrabando, Pedro Vargas, dijo que en las próximas semanas se lanzará la campaña de prevención y concientización sobre los efectos nocivos de esta actividad ilegal, y apoyar a lo hecho en Bolivia.

Aumento de aranceles

Recientemente se conoció el incremento de los aranceles, es decir impuestos, a los cigarrillos y dispositivos electrónicos (vapeadores), lo que incrementará el costo de estos productos que ingresan legalmente al mercado nacional, pero también alentará al contrabando de éstos.

El economista y exdirector del Banco Central de Bolivia (BCB), Gabriel Espinoza Y., escribió en su red social X @g_espinoza, “en el mundo, los impuestos a los consumos específicos suelen ser impuestos que buscan disuadir el consumo de un producto en especial (alcohol, por ejemplo, por su alto costo social) o gravar el consumo de lujo. Sin embargo, la estructura del Impuesto al Consumo Especifico (ICE) en Bolivia es principalmente recaudatoria. Esto es una declaración de falta de ingresos fiscales”.

Para nadie es desconocido que el Gobierno enfrenta una falta de liquidez debido a la caída de los ingresos por el gas, que no puede reemplazar por el momento, aunque hay anuncios de alcanzar cifras fabulosas una vez puesto en marcha el proyecto del carbonato de litio, mientras tanto en el mercado internacional el valor de la tonelada va en declive.

Seminario

En su artículo de opinión del presidente de la Federación de Empresarios Privados de La Paz (FEPLP), Rolando Kempff, de junio pasado, titulado ‘Unidos debemos encarar problema del contrabando’, escribió sobre el seminario internacional realizado en este mes titulado “Del Comercio Informal al Crimen Organizado: Los desafíos de la región frente al contrabando”.

En el mismo señala que “tenemos que reconocer que el contrabando no solo es un viejo problema en Bolivia, Chile y Perú, sino que crece cada vez más, se fortalece y se asocia con otros ilícitos. Por eso, debemos actuar juntos y coordinados”.

En esa cita internacional, se mencionó que la actividad ilícita mueve al año unos 3.800 millones de dólares, aunque algunos sectores manejan cifras diferentes, pero pasan los 3.500 millones.

Destaca algunas intervenciones, como de Espinoza, quien usó como ejemplo el caso del contrabando de cigarrillos, que es alentado por la asimetría impositiva, pues “la diferencia de precios de venta, resultado de las tasas impositivas, favorece el contrabando”.

Mientras para el economista Antonio Saravia, la mejor forma de luchar contra el contrabando no es combatirla sino legalizarla, es decir, desburocratizar la actividad pública, facilitando un mejor desempeño de la actividad privada en el país, bajar las regulaciones y hacer más competitiva a la producción nacional.

Por su parte, Fernando Romero, presidente del Colegio de Economistas de Tarija, señaló que las acciones contra este comercio ilícito sólo llegan a un 3% de comisos.

A principios de la presente gestión, la Aduana Nacional informó que el valor de los comisos en la gestión 2022 alcanzó una cifra récord de 737,4 millones de bolivianos (unos 106 millones de dólares). Un año antes, el 2021, la cifra alcanzó a 652 millones de bolivianos (unos 100 millones de dólares, aproximadamente), señala el artículo de Kempff.

Datos

Siles, en conferencia de prensa, indicó que el contrabando crece cada año entre 7% a 8%, y a mayor actividad ilícita se genera mayor evasión impositiva. Indicó que los sectores más afectados por el tema del comercio ilegal son: alimentos, bebidas, fármacos y textiles, de la industria manufacturera.

Asimismo, adelantó que el encuentro realizado en junio se replicará en noviembre en Santiago de Chile para profundizar las actividades de las cámaras de industria de Chile, Perú y Bolivia contra el contrabando.