A poco de celebrar un nuevo aniversario del grito libertario, La Paz muestra datos no tan halagadores, pues se muestra que las industrias manufactureras disminuyeron en el departamento paceño, pero la administración y el comercio crecieron en el período señalado.
Entre 2005 a 2021 la actividad de las industrias manufactureras de La Paz disminuyó, es decir, cayeron de 10,37% a 8,28%, similar situación experimentó restaurantes y hoteles, así como electricidad, gas y agua, también los servicios comunales y domésticos.
En contra posición subieron la actividad de la administración pública de 15% a 21,01%, los establecimientos financieros de 13,19% a 13,58%, comercio 7,81% a 8,87%, pero el que experimentó una alza considerable fue la extracción de minas y canteras de 2,85% a 7,95%, de acuerdo a la información del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (Ibce).
Antes del ingreso del Movimiento Al Socialismo (MAS) al Gobierno, La Paz exportaba textiles al mercado estadounidense en el marco de un acuerdo bilateral, pero la actual administración prefirió no renovar los acuerdos con el país del norte y la gran industria textilera desapareció, a pesar de las promesas de abrir mercados de Venezuela, Brasil o Argentina, nunca se concretaron debido a los requisitos que exigían éstos.
El viernes pasado, el presidente Luis Arce destacó el récord histórico de las exportaciones paceñas en 2022 con 2.776 millones de dólares, indicando que un 95% proveniente de la industria de manufactura, pero no aclaro que el oro metálico representa este porcentaje.
En varias oportunidades el economista y docente de la Universidad Católica Boliviana, Gonzalo Chávez, dijo que el oro metálico también es materia prima y no necesariamente industria manufacturera.
Potencial
A pesar de ese panorama poco alentador, pues el departamento se estaría convirtiendo exportador de materia prima, a pesar de su potencial agropecuario, agrícola y manufacturero.
Por ello la misión de exploración a través de la Marcha Al Norte de La Paz, organizado por los industriales y empresarios paceños, mostró una serie de oportunidades que requieren inversión y seguridad jurídica, pero requieren el apoyo del sector público.
El presidente de la Cámara Departamental de Industrias de La Paz (Cadinpaz), Gonzalo Morales, dijo que los 24 inversionistas bolivianos que acompañaron a la marcha vieron el potencial económico del norte paceño.
Destacó que el norte ya produce soya, mientras tanto el presidente Luis Arce planteó, el pasado 7 de julio, que el departamento puede producir soya para hacer «aceite paceño».
Producción de miel, café, cacao, ganadería, algodón, cítricos, son sectores potenciales del norte paceño, ya que la tierra aún es virgen, resaltó Morales.
Indicó que el 60% del norte de La Paz es amazónico, y la producción de alimentos en la región no sólo abastecería a La Paz y al país, sino también al mercado internacional.
El turismo y la hotelería son los sectores que tienen más posibilidades de ser desarrollados en el mediano plazo, mientras los otros requieren un tiempo entre cinco y 10 años.
Seguridad jurídica
Morales señaló que fueron recibidos con los brazos abiertos por las autoridades municipales y estos prometieron brindar seguridad jurídica, un tema delicado para las inversiones.
Apuntó que uno de los desafíos de los industriales y empresarios paceños es que se reúnan el sector público y privado, en todos los niveles para impulsar la marcha al norte.
La Paz Expone
Mientras tanto, el presidente de la Federación de Empresarios Privados de La Paz, Rolando Kempff, destacó la feria La Paz Expone por su variedad de oferta económica a los visitantes.
La 6ta versión de la Feria Internacional de La Paz «LA PAZ EXPONE 2023″ se desarrolla en el marco de un acuerdo público privado, que demuestra que la articulación entre empresarios y gobierno es viable, destacó.
La feria termina hoy, pero el público todavía podrá observar los emprendimientos nacionales e internacionales en sectores como el comercio, industria, construcción; exportaciones, servicios financieros, así como la oferta turística.
También la puesta en marcha de la economía 4.0, de la naranja, circular y verde, en la que ya incursionaron industrias y empresas de diferentes rubros.
Kempff aseguró que la diversidad de pisos ecológicos de La Paz, convierte al departamento con gran potencial agropecuario, forestal, piscícola, industrial, minero y productor de energía eléctrica.
El Norte Paceño Tropical ocupa la mitad del territorio del departamento con algo más de 60.000 kilómetros cuadrados. Por este motivo, la marcha al Norte es una iniciativa promovida por los empresarios que abrirá las puertas hacia la agroindustria, promoción de agricultura, turismo, entre otros sectores, que cambiarán el mapa económico del país constituyéndose en uno de los elementos centrales de la estrategia de desarrollo departamental.
“Los empresarios paceños expresamos nuestro deseo y compromiso de trabajar de forma coordinada para coadyuvar en el desarrollo económico de La Paz, segunda locomotora del país y el segundo departamento más poblado de Bolivia, el cual aporta con el 24.5% del PIB nacional que aproximadamente son 12 mil millones de dólares en bienes y servicios», expresó Kempff en la inauguración de la feria.
El departamento de La Paz es el principal productor de oro, debido a que concentra en su territorio la mayor parte de cooperativas auríferas, llegando a superar los 3.000 millones de dólares en ventas lo cual representa el 50% de las exportaciones de minerales y es un importante recurso para las Reservas Internacionales del país.
La Paz es considerada un centro financiero importante en Bolivia, albergando a numerosas instituciones bancarias y financieras.
Financiero
En ese contexto y en el marco de la efeméride paceña, la Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban) presentó un informe que posiciona a La Paz como líder del ahorro a nivel nacional y destaca la relevancia del microcrédito, por las actividades comerciales que desarrolla. También datos de la ASFI muestran que sigue en segundo lugar en créditos, después de Santa Cruz.
Los paceños muestran un importante dinamismo en microcréditos, alcanzando a 34% de la participación nacional.
En el marco de la efeméride paceña, la Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban) presentó un informe que posiciona a La Paz como líder del ahorro a nivel nacional y destaca la relevancia del microcrédito, por las actividades comerciales que desarrolla.
Los depósitos alcanzaron, a mayo de 2023, a 15.137 millones de dólares, dando cuenta de la relevancia departamental en el ahorro nacional, con un porcentaje de participación de 55% del total.
«Los paceños destacan por su cultura de ahorro, el crecimiento de los depósitos en el último año fue 9% más, a pesar de que a nivel nacional los depósitos decrecieron en un contexto de retiros en moneda extranjera que también afectaron a los depósitos en moneda nacional. En perspectiva, se espera que los depósitos del público retornen al sistema financiero y el ahorro se dinamice, permitiendo de ese modo que se continúe promoviendo la sana intermediación que favorece al crecimiento económico del país», indicó el secretario Ejecutivo de Asoban, Nelson Villalobos.
Asimismo, la cartera de créditos otorgada por el sistema bancario en el departamento de La Paz, a mayo de 2023, alcanzó a 7.036 millones de dólares, representando el 26% del total a nivel nacional y ubicándose sólo por detrás del departamento de Santa Cruz.
En los últimos doce meses, registró un crecimiento de 5,7%, dando cuenta de su continuo dinamismo, particularmente en el microcrédito, en el que concentra el 34% de la participación a nivel nacional.
Consecuentemente, al interior de la cartera departamental, el 37% ($us 2.614 millones) corresponde al microcrédito; 23% ($us 1.649 millones) a créditos hipotecarios de vivienda; 21% ($us 1.457 millones) al crédito empresarial; 10% ($us 672) al consumo y 9% ($us 644 millones) al crédito pyme.
La relevancia del microcrédito en la cartera del departamento data de gestiones pasadas y refleja el espíritu emprendedor del paceño, tanto en actividades comerciales, como en actividades artesanales productivas.