Vuelven los embotellamientos a Obrajes debido a la afluencia de vehículos pesados para comprar diésel en la gasolinera de la calle 0. La ANH no ofrece una solución, a pesar de los anuncios y las acciones emprendidas. En algunas estaciones de servicio de El Alto, la situación es similar, las filas de movilidades para comprar o esperando a que llegue el producto para su venta.
Las filas de vehículos que requieren diésel no terminan, debido a que el producto que llega no abastece a la demanda del combustible en las estaciones de servicio, que afecta a la productividad de muchos sectores económicos.
A pesar de los anuncios de las entidades del sector de hidrocarburos, de inyectar mayores volúmenes al mercado para cubrir la demanda, así como de fiscalizar la distribución y el contrabando, la situación no mejora.
En la zona sur se observó una larga fila de camiones esperando su turno para cargar combustible, pero también en la urbe alteña, las movilidades aguardan por diésel.
Hace días atrás, hubo protesta por los propietarios de las cisternas que distribuyen el combustible en el mercado de Santa Cruz, por la aprehensión de su dirigente y tras la medida bloqueó la refinería de Palmasola.
Como se recordará, hace unas semanas, la situación era complicada por la falta del combustible, debido a que los buques con diésel no podían descargar por la precariedad de la infraestructura de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) en la terminal de Sica Sica, Arica Chile, debido a la restricción aplicada por la armada del vecino país.
Casi el 80% del diésel que se consume en el país se importa y el 55% de gasolina se compra.