«Estas mercancías no aptas para su consumo pretendían ser comercializadas en mercados de Potosí y La Paz, significando un gran riesgo a la salud de la población», informó este martes, en conferencia de prensa, el administrador de Aduana Frontera Villazón, Abraham Rollano.
Explicó que toda esa mercancía equivale a 132.063 bolivianos, es de procedencia extranjera y no contaba con la declaración de importación, ni la certificación emitida por el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag).
El primer camión marca Nissan, color rojo, intentó ingresar al Puesto de Control Aduanero (PIA) con dos toneladas de harina y arroz, valuados en 20.000 bolivianos, ocultas bajo semillas de papa, sin el formulario de la Declaración de Mercancías de Importación (DIM), ni la factura comercial.
El 1 de septiembre, en un operativo de control, en la localidad de San Miguel, Tupiza, se detectó un camión rojo Marca Renault, transportando 27 toneladas de harina argentina, con fecha de expiración vencida.
El producto fue comisado sin resistencia de sus dueños y traslado al Recinto Aduanero Albo, en la ciudad de Villazón.
El denominado Plan del Sur está vigente desde el 7 de julio del año pasado, ante la caída de la moneda argentina, para evitar el ingreso de mercancía de contrabando y proteger la economía nacional.