Después de suspender la prohibición para el uso de criptoactivos o criptomonedas, el Banco Central de Bolivia (BCB) abrió la oportunidad para las transacciones en este tipo de activos. Sin embargo, el presidente del Colegio Departamental de Tarija, Fernando Romero, comentó que la iniciativa estatal ayudará a un segmento pequeño de la población, pero no aliviará la escasez de dólares en el mercado nacional.
Hace muy poco, Bolivia formaba parte de los únicos siete países del mundo donde se prohibía el uso de las criptomonedas, al menos a través de entidades financieras reguladas. Después de varios años, donde se sostuvo los riesgos inherentes a trabajar con criptomonedas y sobre todo su posible uso para lavar dinero y financiar actividades ilegales; esto cambio recientemente mediante la Resolución de Directorio 084/2024 que permite ahora las operaciones con activos digitales, que según el BCB es para fortalecer las actividades financieras y comerciales de la economía mediante el uso de estas monedas digitales, explicó.
“(…) “ayudará” a un segmento muy pequeño de la población del país, y que tampoco esta innovación va a aliviar la escasez de dólares en nuestra economía. Hay que recordar que el sector privado formal, importadores y exportadores, están obligados a hacer sus transacciones mediante una banca regulada, por la bancarización y por la normativa aduanera, entre otros factores”, apuntó.
Se observa que puede ayudar a personas naturales, empresas informales, y tal vez a algunas empresas formales que puedan evadir o no necesitar trabajar bajo alguna normativa específica financiera o fiscal vigente en el país, reflexionó.
¿Qué son las criptomonedas?
En términos sencillos, las criptomonedas, criptodivisas o criptoactivos son monedas (dinero) digital o virtual, que sirve como medio de intercambio, de pago, de transferencia, de inversión u otro de carácter financiero o comercial. En un activo monetario no tangible (virtual) que se transa mediante internet, cuyo valor o precio se define en su propio mercado y por lo tanto es variable. En nuestro país las criptomonedas más usadas son Tether, Bitcoin, Ethereum, Litecoin, Ripple, Binance.
Ahora bien, Romero señaló que se puede comprar criptomonedas a través de un agente de cambio, un sitio web o un cajero ATM de criptomonedas. “Claro, hay que tener conocimiento y estar muy bien informado para no caer en sitios, redes, plataformas o aplicaciones fraudulentas de estos activos virtuales, considerando que no son reguladas, ya que todo se tranza de manera digital, en la nube virtual, lo cual lo diferencia ampliamente de la banca tradicional. Además, una criptomoneda no tiene respaldo gubernamental en general y su valor es variable, a diferencias de las divisas como el dólar americano”, indicó.
Entre algunas desventajas: 1) Los pagos con criptomonedas no tienen protecciones legales. 2) Por lo general, los pagos con criptomonedas son irreversibles. 3) Es probable que una parte de la información sobre sus transacciones sea pública, mediante el registro llamado “blockchain.”
Normativa
En una entrevista con Red Uno, el ex director del BCB, Gabriel Espinoza, coincidió, por separado, con Romero, al indicar que el beneficio sólo será para el sector informal, pues el formal tiene que cumplir una serie de normativas para realizar transacciones financieras.
Por ello, tal como está ahora el panorama, sin normativa, ley o decreto sobre las criptomonedas de manera específica y detallada al respecto, se abren las posibilidades para que se pueda lavar dinero, tener un enriquecimiento ilícito y financiar actividades ilícitas mediante el uso de estas, observó Romero.
“Es prioritario establecer un marco regulatorio establecido por el BCB y la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI), que no obvie la creación de un mercado o bolsa de criptomonedas regulada por el Estado para evitar ilícitos y estafas a sus usuarios.