“Vamos a remitir el proyecto de Ley al Concejo (Municipal), acompañados de todas las organizaciones sociales y esperemos que se apruebe en esta semana. Este plan reunió bastantes necesidades, tendremos el presupuesto asignado y así fortalecer los servicios legales integrales y defensorías para tener una mejor conciliación e intervención y decirle ¡basta a la violencia!”, manifestó Copa.
La pasada jornada, en el auditorio de la Casa Municipal, se reunieron mujeres de distintas organizaciones sociales, juntas vecinales, gremiales, subalcaldes y el presidente del Concejo Municipal para participar de la actividad en la que la burgomaestre alteña se comprometió a buscar la aprobación de la ley.
La alcaldesa resaltó que el plan detalla las acciones, los plazos y los recursos necesarios para lograr todos los objetivos trazados; además, se proyecta la ejecución de un hospital para la mujer alteña, no solo para atender el ámbito de la maternidad, sino también los derechos sexuales y reproductivos.
“Vamos a poder fortalecer nuestros Slims (Servicios Legal Integral Municipal), nuestras Defensorías y tener una mejor conciliación y una mejor intervención (…) esperemos que en dos semanas (se apruebe la norma). No lo vamos a dejar al presidente (del Concejo) para que lo pueda agendar”, recalcó la alcaldesa.
En tanto que la directora ejecutiva del centro de promoción de la mujer Gregoria Apaza, Carla Gutiérrez, precisó que el proyecto se articulará con el Plan Territorial de Desarrollo Integral (PTDI), que identifica a las necesidades y demandas de las mujeres alteñas.
“Es un trabajo que nos ha llevado varios meses de diálogos y reflexiones entre las mujeres de organizaciones sociales, las mujeres de a pie de la ciudad de El Alto y por supuesto con el Gobierno Autónomo Municipal (…) cuando se apruebe, se insertará a la planificación municipal para asignación presupuestaria que nos permita la visibilización de estas necesidades y atención”, indicó Gutiérrez.
Explicó que el Pimma fue construido bajo tres pilares: desarrollo humano sin violencias, desarrollo económico y tecnológico de las mujeres y, el tercero, orientado a la gestión con transparencia para fortalecer los liderazgos con las mujeres.