Bolivianos acuden a las fronteras a comprar monedas de pa铆ses vecinos para cuidar su valor adquisitivo, a trav茅s de la compra de d贸lares, pero tambi茅n para adquirir mercader铆a.
No s贸lo se devalu贸 el boliviano frente al d贸lar estadounidense, sino tambi茅n con las monedas de pa铆ses vecinos. Los gremialistas indican que la divisa norteamericana est谩 en 10 bolivianos, lo que significa que el poder adquisitivo ya perdi贸 casi 50%. No hay acci贸n que pueda detener la ca铆da.
El presidente del Colegio Departamental de Economistas de Tarija, Fernando Romero, se帽al贸 que el boliviano se ha depreciado respecto a la moneda de los pa铆ses vecinos.
Los gremialistas en redes sociales se帽alan que en la frontera con Brasil, por ejemplo, los reales que se compraba con 1.000 bolivianos, ahora subieron a 1.500 bolivianos; y similar situaci贸n est谩 pasando con el peso chileno, el sol peruano y el peso argentino.
Mientras con monedas como el Sol peruano, el peso Chileno, se observa una volatilidad, en el caso del Peso argentino tambi茅n, pero registra un ligero incremento.
Ese contexto, muestra que a pesar de que la mayor铆a de los pa铆ses tienen un tipo de cambio flotante, y Bolivia un tipo de cambio fijo, la depreciaci贸n experimenta una volatilidad. La falta de d贸lares en el mercado nacional provoc贸 la creaci贸n del mercado paralelo, a donde acuden empresarios, industria e importadores, a pesar de un valor alto, por encima del oficial.
Romero sostiene que el mercado paralelo provoc贸 la devaluaci贸n del boliviano en m谩s de 45%, ya que en la frontera la divisa lleg贸 a costar a 10,5 bolivianos, y esto ocasiona inestabilidad de precios de los productos nacionales, as铆 como importados.
El valor del d贸lar va subiendo en el mercado paralelo y hasta que no se tome medidas especiales por parte del Gobierno, la divisa seguir谩 experimentado un alza.
Las autoridades del sector econ贸mico atribuyen la situaci贸n a la especulaci贸n; sin embargo, economistas critican que no se tomen acciones para evitar este fen贸meno, y hay otras autoridades que se帽alan denunciar a las personas que venden un d贸lar por encima del tipo de cambio oficial.
Asimismo, Romero asegura que el alza de la divisa ya est谩 provocando un proceso inflacionario acelerado, y como muestra es la cifra acumulada a mayo, que alcanz贸 a 2,49%, superior al porcentaje registrado en la pasada gesti贸n, que lleg贸 a 2,1%.
En la calle
El tipo de cambio en la calle y en los bancos se est谩 disparando. Algunas explicaciones parten de los fundamentos de mercado: la oferta de divisas ha ca铆do mucho m谩s que la demanda (al final del d铆a, el modelo basado en consumo era un modelo importador; y fueron muy agresivos con la inversi贸n, por lo que hoy los sectores que producen divisas producen mucho menos de lo que necesitamos… la consecuencia: sin d贸lares la cosa no funciona), escribi贸 en X (Twitter) el exdirector del Banco Central de Bolivia (BCB), Gabriel Espinoza Y.
鈥淧ero tambi茅n han otros factores, como el de las expectativas, que de manera muy torpe inflaba el ministro Montenegro, hace unas semanas, afirmando que los d贸lares iban a llegar (solo est谩n retrasados dec铆a) o con medidas mal ejecutadas, incompletas y fuera de tiempo, como la de las criptomonedas, que ahora permiten desintermediar a煤n m谩s el flujo de divisas hacia el pa铆s y abren una puerta a la marcaci贸n de precios鈥, sostiene en su cuenta @g_espinoza.
En resumen, lo que tenemos es una tormenta perfecta, en la que las condiciones objetivas son todas malas y, para rematar, los que tienen que capitanear el barco son, al menos y sin duda alguna, ineptos para una situaci贸n tan compleja como la de hoy, concluye.
Sin resolver
Por otra parte, el economista Gonzalo Ch谩vez, en sus redes sociales, se帽ala que el tipo de cambio est谩 dif铆cil de resolverlo, pero plantea dos acciones para mitigar los efectos del d贸lar paralelo: como un cambio flotante y paquetes integrales.
En el caso de aplicar el tipo de cambio flotante, este podr铆a aumentar el valor mucho m谩s de lo que est谩 en la actualidad la divisa, pero una de las consecuencias ser铆a un incremento significativo de la inflaci贸n; por otro lado, plantea paquetes integrales, no s贸lo en el tema de los d贸lares, sino tambi茅n fiscal, monetario, exportaciones, inversiones p煤blicas y gastos.
En una entrevista anterior, Espinoza explic贸 que s铆 se modifica el tipo de cambio fijo a uno cercano al paralelo, el BCB deber谩 contar con la divisa para mantener el precio, pero no tiene d贸lares; en la aplicaci贸n del flotante, no necesitar铆a tener la divisa, pero el Gobierno enfrentar铆a una inflaci贸n, que afectar铆a a sus compras, como los combustibles y un aumento del d茅ficit fiscal.
Esas acciones apuntar铆an a intentar estabilizar o en el mejor de los casos bajar el tipo de cambio. Mientras tanto, la poblaci贸n deber谩 convivir con varios mercados paralelos, por ello la situaci贸n es compleja y no es de corto plazo, reflexion贸 el economista.
Para aumentar la oferta de d贸lares en el mercado nacional, es que el Gobierno consiga la divisa, que podr铆a ser a trav茅s de un pr茅stamo del Fondo Monetario Internacional (FMI) o de otro organismo internacional, de alrededor de 3.000 millones.