El crecimiento de la economía nacional no llegará a las proyecciones del Gobierno, aunque se aproxima a las estimaciones de organismos internacionales.

En el primer trimestre de 2024, el Instituto Nacional de Estadística (INE) informó que el crecimiento fue de 1,31%, pero recientemente sacó un nuevo informe en la que indica que al primer semestre Bolivia registra 2,58%. Sin embargo, economistas proyectan estanflación y una desaceleración.
La economía nacional ya se encuentra en un escenario de desaceleración, señaló el exdirector del Banco Central de Bolivia (BCB), Gabriel Espinoza, a la pregunta si la economía boliviana está cerca de una recesión, explicó que este indicador se presenta cuando se registra dos trimestres negativos.
Mientras el analista económico Darío Monasterio, sostiene que la tendencia de esta segunda ola de tasas decrecientes del Producto Interno Bruto (PIB), muestra claramente que se va camino a una recesión económica.
Tanto Monasterio y Espinoza, coinciden por separado, que la falta de información de las entidades públicas, como el INE, hacen difícil el análisis de los datos macroeconómicos de la economía nacional.
El último día de octubre, el INE publicó la cifra acumulada del crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), de enero a junio, de 2,58%. Como se recordará, en el primer trimestre la economía boliviana sólo creció 1,31%.

Dólares
La escasez de dólares, desde febrero de 2023, se agudizó en el mercado nacional, que se refleja en menos importaciones, así como en el alza de precios de productos importados e insumos para la industria y la agroindustria.
El dólar oficial está en 6,96 bolivianos, en el mercado paralelo la cotización está por encima de los 10 bolivianos, pero hay diferencias entre las regiones y más en las fronteras.
Jaime Dunn, en su momento, identificó 10 tipos de cambio a nivel nacional. Entre las ciudades y las fronteras, la cotización varía.

Recesión
Espinoza no cree que la economía registre recesión, pero está cerca de una estanflación, lo que significa que la economía crece poco o se estanca probablemente hasta fin de año y parte del 2025.
“Al mismo tiempo los precios suben, obviamente por el tipo de cambio costoso, por las dificultades de operar y de enviar al mercado nacional los productos”, agregó.
Pero la estimación es más complicada de tratar a comparación de una recesión, que es más simple de combatir a través de políticas económicas, ya que se puede bajar la tasa de interés e introducir plata para aumentar el gasto público e impulsar el crecimiento, acotó.
Sin embargo, la estanflación es más difícil de manejar, mucho más complejo, pues si se aplica políticas para bajar la inflación el crecimiento se estanca, pero si se implementa herramientas para dinamizar la economía, genera subida de precios, reveló Espinoza a EL DIARIO.
Por su parte, Monasterio indica que por deducción, tenemos que al caer la tasa anual del crecimiento económico, nos acercamos o es más probable que hayan trimestres con crecimiento negativo, aunque en el total del año se tenga un ínfimo crecimiento positivo como el que han proyectado los organismos internacionales para Bolivia en 2024 y 2025.
El Gobierno proyectó un crecimiento para la presente gestión de 3,71%, en cambio el Fondo Monetario internacional (FMI) estima 1,6%, mientras que el Banco Mundial reduce la cifra a sólo 1,4%.

Bloqueos y pérdidas
Para los economistas, la medida aplicada por los seguidores de Morales, han paralizado las actividades económicas y empuja a la quiebra a las empresas, industrias y agroindustria, por lo que pone en riesgo el abastecimiento de alimentos.
Las cifras de las pérdidas oscilan entre 1.500 millones de dólares a 1.700 millones, pero de continuar la medida, la cifra puede subir a más.
El sector industrial perdió sólo en 18 días de bloqueo 9.585 millones de bolivianos. A la falta de divisas para la importación de insumos se sumó el corte de vías, lo que agudiza la situación de los industriales bolivianos.
Según el analista económico Gonzalo Chávez, el bloqueo rompe las cadenas productivas, pues no se siembra, se produce menos, hay problemas de compra y se rompen contratos con el mercado exterior.
El turismo también está afectado y miles de actividades económicas no se recuperan de inmediato, demoran en levantarse nuevamente, en recuperar la confianza de los compradores y visitantes.
En entrevista con medios digitales, Chávez indicó que no se necesita a Bloomberg en Línea para saber que estamos en crisis, ya que sólo basta mirar al transporte que no puede circular por falta de gasolina, la caserita bajó sus ventas, el Gobierno no tiene divisa para importar combustibles y el productor no tiene insumos.
El “bloqueo es criminal” y tiene un impacto negativo sobre la economía nacional, indicó a tiempo de señalar que esta manera de protesta no es legítima, ya que afecta la vida de terceras personas.

Crisis
La actual crisis económica que vive Bolivia ha comenzado el 2014, principalmente por la caída de la producción e ingresos del sector hidrocarburífero, a pesar de ello, el gasto estatal se mantiene elevado y creciente, dando lugar a 11 años consecutivos de déficit fiscal, señaló el presidente del Colegio Departamental de Economistas de Tarija, Fernando Romero.
El 2023, el déficit fiscal representó el 11% del PIB, habiendo gastado más 5.011 millones de dólares y para la presente gestión, el FMI proyecta 10% y similar cifra para el 2025.
El economista Juan Antonio Morales expresó que un déficit de dos dígitos no es bueno, y en promedio una cifra manejable sería de 3% con respecto al PIB.
Romero proyecta que, en la presente gestión, el crecimiento de la economía estará entre 1,5% a 2,5%; la inflación entre 8% a 12%; el déficit fiscal más de 10%; la deuda pública estará en 85% del PIB; la ejecución de la inversión pública oscilará entre 50% a 60% y las Reservas Internacionales Netas (RIN) llegaría a 2.000 millones de dólares por el alza del precio del oro en el mercado internacional.