La Inversión Extranjera Directa (IED), de Bolivia en el 2023, fue de 294 millones de dólares, cuya cifra se encuentra entre las más bajas de la región, representando apenas el 0,2% del total recibido en Latinoamérica y el Caribe, de acuerdo al informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe 2024 (Cepal), presentado hace una semana.
Un dato importante, es que el 2022 la IED en Bolivia solo fue apenas de 6 millones de dólares, la más baja en los últimos años. La inversión extranjera desde el 2021 ha caído en un 50%, lo que significa menos recursos para financiar el desarrollo de nuestro país, dijo el presidente del Colegio Departamental de Economistas de Tarija, Fernando Romero.
“Recientemente la Cepal ha publicado su informe ‘La inversión extranjera directa en América Latina y el Caribe 2024’, donde se hace un reporte muy completo de la inversión extranjera hecha en la región, en sus países y sobre las políticas para atraer inversión de manera eficiente y sostenible. El 2023 la inversión directa fue de 184.304 millones de dólares, un 9,9% menos que del 2022; sin embargo ha representado el 2,8% del PIB regional”, apuntó.
Dado el desequilibrio crónico fiscal, con escasez de dólares, un tipo de cambio paralelo elevado, presiones inflacionarias, riesgos a una crisis de balanza de pagos, devaluación (oficial) de la moneda, desabastecimiento de carburantes y de otros productos, ya sea por insolvencia o mayores costos, todo esto suma a una bomba molotov que está cargada con conflictos políticos y sociales, que un gobierno fracturado no podrá resolverlo solo, reflexionó Romero.
Eso afectará claramente a nuestro alicaído crecimiento económico, ahuyentando la inversión extranjera y poniendo señales de alerta para los tenedores de nuestra deuda pública inclusive, exigiendo mayores rendimientos (+20%), alertó.
JP Morgan lo refleja así, en su informe del 01 de agosto de 2024, donde ubica a Bolivia con 2.151 puntos de riesgo país, como la 2da. economía del continente menos atractiva para invertir.
El economista Jaime Dunn, en sus redes sociales, sostiene que el Estado Plurinacional y su modelo económico no funcionó, sino más bien llevó al país al centralismo, por ello sugiere que se priorice la libertad individual, la propiedad privada, la seguridad jurídica y una apertura de todos los mercados.