Jhonny Vargas

Hay una gran conspiraci贸n en marcha, encabezada por el ex mandatario contra Luis Arce Catacora, reclamando su habilitaci贸n para las pr贸ximas elecciones generales. Y la Sala Constitucional cuarta del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, insta a no bloquear los caminos del pa铆s. El ex mandatario hab铆a decidido retirarse, pero se reintegra, mientras tanto el Ministro de Gobierno denuncia que el ex mandatario se moviliza en un veh铆culo de lujo de una familia vinculada al narcotr谩fico, la 鈥渘arco vagoneta鈥� valuada en 90.000 d贸lares, dando a entender que este movimiento sedicioso es financiado por el narcotr谩fico, como si el ministro Del Castillo fuera palad铆n de la lucha contra el crimen organizado transnacional. Pero todo el mundo sabe que el mismo gobierno boliviano est谩 metido hasta el cuello en este gran negocio. Y contin煤an las agresiones a mujeres periodistas que solo hacen su trabajo.

El presidente Arce Catacora debe cumplir y hacer respetar las leyes, mantener el orden, he ah铆 la tarea elemental de su gobierno, pero no lo hace, tampoco mantiene el orden p煤blico, por el contrario, permite que una marcha ponga fin a su gobierno. Arce debe dar al pa铆s una autoridad sostenida y una administraci贸n vigilante, su acci贸n debe estar destinada a los servicios p煤blicos, a asegurar el funcionamiento de las instituciones del Estado y mantener con firmeza entre sus servidores p煤blicos, la disciplina y la armon铆a. Con Arce tenemos una autoridad ca铆da y una administraci贸n distra铆da, su acci贸n est谩 destinada a la corrupci贸n p煤blica, asegurando el proceso de desinstitucionalizaci贸n del Estado y mantiene entre sus servidores p煤blicos la indisciplina y la mayor desarmon铆a. Toda esta situaci贸n de crisis pol铆tica en el interior de su partido nos ha llevado a una polarizaci贸n destructiva de toda la sociedad boliviana.

En nuestro pa铆s dos pol铆ticas principales rivalizan entre s铆, disput谩ndose la victoria en unas pr贸ximas elecciones generales que esperamos sean limpias y transparentes, con un nuevo padr贸n electoral y una instituci贸n electoral independiente. Una es la pol铆tica de resistencia a dejar el poder, pol铆tica de conservaci贸n del poder por parte del r茅gimen dictatorial, mezquina, ego铆sta, de reacci贸n fr铆a y calculadora que utiliza la violencia y el terrorismo de Estado, que va en contra de las reivindicaciones populares. Y la otra es la pol铆tica de la regeneraci贸n, de la renovaci贸n, que proclama el poder de la democracia directa, la justicia social, la solidaridad, el progreso econ贸mico y la elevaci贸n moral de los ciudadanos. 脡sta 煤ltima es la pol铆tica que responde a las aspiraciones y las necesidades de la poblaci贸n boliviana.

Frente a este escenario de conflicto social inminente, Arce debe procurar conciliar el respeto a las leyes y el supremo inter茅s de la paz p煤blica, pero su pacto de unidad convoca a contramarcha y a una masiva concentraci贸n en la zona de Ventilla de El Alto. Es todo lo contrario a c贸mo debe proceder un buen gobierno, con mucha prudencia, tolerancia y no apelando a la violencia extrema. Pero todo parece indicar que habr谩 un ba帽o de sangre, cuando ahora m谩s que nunca Bolivia necesita concordia y uni贸n de todos los bolivianos para hacer frente a la crisis econ贸mica que est谩 afectando nuestros bolsillos. Los bolivianos hemos tenido que soportar constantemente, una avalancha de ultrajes, injurias y calumnias de parte del Movimiento al Socialismo. Queremos un gobierno que procure la libertad para todos, no solo para un partido, porque su idea de libertad, solo es un privilegio de los jerarcas del MAS y no de todo el pueblo, esto ahora debe cambiar y contra viento y marea, el pueblo ser谩 libre.

Se帽or ex mandatario, no hay conspirar contra la salud de la patria, todo su entorno est谩 corrompido por la soberbia. Usted se ha olvidado del pueblo, en el momento m谩s cr铆tico ha abandonado a su pueblo, incluso hasta en la marcha para salvar la patria los abandona y si no fuera por la ola de cr铆ticas que gener贸 su anuncio de retiro, usted no hubiese vuelto a la marcha. Claro, se siente muy c贸modo acompa帽ando a su marcha en un veh铆culo de lujo, mientras sus seguidores estar铆an dispuestos a dar la vida por usted. Bueno, no tanto por usted, sino por las ventajas que pueden recibir ellos, si logra su objetivo. Usted que se cree el l铆der de los humildes, no puede caminar, debe ir placenteramente sentado en un veh铆culo de casi 100 mil d贸lares鈥�

Como quisiera tener un presidente valiente, que diga en conferencia de prensa lo siguiente: 鈥淓l que proponga alterar el orden en Bolivia, el que yo sepa que ha hecho o proyecta hacer o intenta algo en da帽o de la patria, conocer谩 a costa suya que este pa铆s tiene un presidente vigilante, una Asamblea Legislativa fuerte y valerosa y un 脫rgano Judicial con excelentes magistrados鈥�. Les juro que inclusive yo lo seguir铆a. Pero en Bolivia tenemos un presidente negligente, un Legislativo d茅bil y corrompible y un 脫rgano Judicial con p茅simos magistrados. Ahora bien, si se ha establecido ya un orden constitucional en el pa铆s, dos cosas siempre tenemos derecho a exigirle: orden y libertad. Si una sociedad se ve privada del orden, vive angustiada, inquieta y presa de agitaciones, como estamos ahora todos los bolivianos. Si el ex mandatario reclama por sus derechos pol铆ticos, cuando existe una sentencia constitucional que inhabilita su candidatura, 茅l est谩 atentando contra la libertad de todos.

Jhonny Vargas es Polit贸logo y Docente de Postgrado.