Severo Cruz Selaez
Quienes están deteriorados políticamente, pretenderán recuperar fuerzas con “el cuento chino”, rumbo a las elecciones del 2025. Este año, en consecuencia, ya fue electoralizado, prematuramente. Es el periodo más “enguerrillado”, por lo visto, para dos figuras de una misma sigla partidaria, quienes, sea dicho de paso, medraron a título de los pobres, durante aproximadamente 17 años. Ellos pugnarán por seguir detentando el Poder, pese a la calamitosa situación económica, resultado de la pésima administración pública. Posiblemente haya instrucciones en ese sentido, de aquellos dictadores que, para sobrevivir, cometieron, recientemente, el fraude electoral más escandaloso de la historia.
La angurria por el Poder no tiene límites. En tiempos de la dictadura, los caudillos, con esa finalidad, hicieron gala de su poder omnímodo. Incurrieron en ese despropósito, mientras el país se desmoronaba. El pueblo caminaba con la canasta familiar vacía. Los sueldos y salarios perdían poder adquisitivo. Pero los jerarcas del régimen tenáin una vida de ostentación y despilfarro. Ahí se veía la tremenda desigualdad social.
Ahora, en una democracia debilitada por ciertos dislates, parece que esas actitudes vuelven, sensiblemente. Algunos elementos, que dicen representar el civilismo, pero son cuestionados inclusive por sus propios congéneres, concurren a las lides políticas. Creen que son los “salvadores” y que arreglarían en un abrir y cerrar de ojos el problema de la escasez de combustibles y propiciarían una lluvia de dólares. Que generarían empleo, para reducir el comercio informal. Que se podría terminar con el subsidio en ese rubro. Que acabarían con los índices de la pobreza y extrema pobreza. Que trabajarían, junto con la empresa privada, por el bien común. Que posibilitarían el retorno de las vacas gordas, no obstante que el ciclo del GAS tiende a cerrarse. Que erradicarían el narcotráfico y el contrabando. Éste último puso en peligro, al finalizar el 2023, más de 600 mil puestos formales, en la industria nacional (*).
Lo harían como si tuvieran varita mágica. Como si fueran los predestinados por la Pachamama, que fue quemada por pirómanos. Que dicen representar a un partido, cuyas fisuras provocan el desbande. El pueblo boliviano, tantas veces burlado en sus aspiraciones de mejores condiciones de vida, escuchará, en ese contexto, verdades y medias verdades, calumnias y falacias, de conocidos mitómanos. Éstos intentarán distraerlo y confundirlo, con versiones tergiversadas y antojadizas. Jamás reconocerán los errores y excesos, registrados durante los gobiernos de turno. El Poder desgasta y también acaba, con bandos de tendencias opuestas. El manejo poco trasparente de las arcas del Estado, corrobora, de una u otra manera, acciones de latrocinio.
En suma: habría que tomar nota de los hechos y dichos, de quienes, de manera permanente y sistemática, pretenden engatusar, con miras electorales, a los incautos.
(*) “Economía cierra con subida de deuda, escasez de dólares, alta informalidad y déficit comercial”. EL DIARIO, La Paz – Bolivia, 17 de diciembre de 2023.