Juan Pablo Quiroz
Hasta d贸nde llegan las contradicciones y el cinismo presidencial, al hablar de ser la mejor econom铆a de la regi贸n, del proceso de industrializaci贸n, de sustituci贸n de importaciones y tener la menor inflaci贸n, a no hay combustibles por razones clim谩ticas, o a que no se cuid贸 la nacionalizaci贸n. Volviendo a la palestra, anunciando que 鈥渓as amas de casa van a sonre铆r cuando vayan al mercado鈥 y el elogio a su modelo econ贸mico, social, comunitario y productivo en su intervenci贸n en la reuni贸n del G20 en Brasil.
En marzo de este a帽o, el docente en econom铆a, a modo ensalzar su pol铆tica de bolivianizaci贸n y de tapar su ineptitud por la falta de divisas, dijo que los ni帽os de hoy 鈥渘o conocen el d贸lar鈥, a diferencia de los mayores de 30 a帽os que, 鈥渜uiz谩s recib铆an sus recreos, sus mesadas en d贸lares鈥, lo que contradictoriamente representa un elogio al neoliberalismo por parte de un pseudo zurdo, momento en el que 茅l era funcionario del Banco Central.
En los 煤ltimos dos fines de semana, mi sobrina de 11 a帽os pregunt贸 驴por qu茅 no simplemente se imprimen m谩s billetes? A lo que se le explic贸 la relaci贸n entre la masa monetaria con la cantidad de bienes y servicios disponibles en la econom铆a y la inflaci贸n.
Not谩ndose que el tema hab铆a calado profundo, el siguiente fin de semana, –entre tanto el hijo del presidente recib铆a de manera irregular casi 20.000 litros de di茅sel, mientras que los choferes deb铆an hacer 3 d铆as de cola en los surtidores–, coment贸 con mucho sentimiento que, la inflaci贸n estaba golpeando duramente su econom铆a. Puso el ejemplo de que hace no mucho tiempo (a帽o y medio o dos) se pod铆a comprar un Pilfrut en 50 centavos, despu茅s, de manera repentina subi贸 a 1 boliviano, ahora est谩 a Bs 1.50.
Explic贸 que, hasta hace unos meses, con 5 bolivianos ella pod铆a comprar en su colegio un pastelito de queso de 4 bs y 1 vaso de soda de 1 Bs. Ahora el pastelito cuesta 5 Bs. Las galletas que antes costaban entre 2.50 y 3 bolivianos ahora cuestan a Bs 4.
Hace poco los gremiales de La Paz han salido a manifestarse en contra de la inflaci贸n, su secretaria general declar贸 preocupada, poniendo como ejemplo que una cajita de chicles que costaba 22 bolivianos ha pasado por los 40 y ahora est谩 en 76. Se cuestionaba, con ese costo, debemos vender a 1 boliviano la unidad para poder ganar. Pero no es lo 煤nico, ya que a esos incrementos se adhiere el desprecio de los compradores, trat谩ndoles incluso de rateras.
A帽adi贸, pr谩cticamente todos los productos que se transan son importados, siendo los mayoristas los que incrementan de manera exorbitante, lo que tiene que ser traspasado al comprador. El problema es que las ventas han bajado, al punto que hay productos que ya no salen.
A eso se suma que los ilegales se asientan donde quieran, sin que la guardia municipal les diga algo, convirti茅ndose en una competencia desleal, ya que sus puestos de venta tributan patentes y se les impide deambular, por lo que deben aguantarse, ya sea que llueva o haga fr铆o, ya sea que vendan o no, siendo su 煤nica fuente de ingresos, pues dependen de la venta del d铆a.
Otra compa帽era acota: 鈥淪e帽or Presidente de la Rep煤blica, 隆BASTA! Ya no nos mienta, hable con la verdad en la mano, mire que la canasta familiar est谩 por las nubes, usted no sufre porque todo tiene alcanzado, en cambio la gente del comercio minorista, un d铆a que no vendemos, no comemos, y detr谩s de nosotros hay una familia, p贸ngase la mano al pecho. 隆Basta de enga帽arnos! 隆Basta de decir: estamos bien! 隆Que hay di茅sel, que hay todo! 隆Es MENTIRA, se帽or Presidente!鈥. Estas palabras expresan el sentir de los bolivianos.
El autor es economista.