Noticia BO

Adhesión de Bolivia al Mercosur… ¿Déjà vu?

El Diario
Publicado Jueves, 18 de Julio de 2024.
Adhesión de Bolivia al Mercosur… ¿Déjà vu?
sin entradilla

Gary Antonio Rodríguez Álvarez

El sabio Salomón dijo una vez que nada nuevo hay bajo el sol, mientras que el comunista Karl Marx habría dicho que la historia se repite dos veces. Todo parece indicar que ambos tenían razón a la luz de la reciente apuesta por incorporar a Bolivia al Mercado Común del Sur (Mercosur) que, estrictamente hablando, luego de 33 años de existencia está muy lejos de ser tal, pese a que Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay se habían propuesto lograrlo en 4 años a partir de su fundación en 1991. Recuerdo que haciendo mis “primeros pininos” como negociador internacional, desahucié tal posibilidad y el tiempo me dio la razón.

Amén de aquello, hay quienes todavía creen en este proyecto integracionista, cuyo sesgo proteccionista tiene en Paraguay y Uruguay a dos pequeñas naciones que quieren flexibilizar al Mercosur para negociar bilateralmente acuerdos de libre comercio con países desarrollados, siendo que no solo les impide hacerlo por la obligatoriedad de actuar en bloque, sino que, pese a haber firmado Mercosur dos acuerdos –luego de 20 años de negociación con la Unión Europea y 5 años con Singapur– siguen sin entrar en vigor, mientras que países como Chile, México, Colombia, Perú o Ecuador, consolidaron sendos acuerdos de libre comercio a favor de sus exportadores para vender a mega mercados como Estados Unidos de América, Unión Europea y China. El pedido de Paraguay y Uruguay de “abrir” el Mercosur, encuentra ahora un fuerte respaldo en Argentina, por lo que el futuro del bloque podría entrar en conflicto.

Pese a ello, gran alborozo causó el reciente “ingreso” de nuestro país al Mercosur, como entusiastamente lo reflejó la prensa nacional e internacional bajo estos titulares: “Bolivia dice que su adhesión al Mercosur dará “beneficios” más allá de lo económico”; “Con la entrega de la ley de adhesión, Bolivia ya es miembro pleno del Mercosur”; “Adhesión de Bolivia al Mercosur generará “grandes beneficios” en comercio, salud y educación”; “La adhesión de Bolivia al Mercosur fortalecerá el comercio bilateral y la cooperación económica”; “Bolivia promulga adhesión plena al Mercosur y destaca beneficios”, aunque también hubo la disonancia de que “Bolivia entra al Mercosur en un contexto de conflicto diplomático”, notas todas derivadas de la 64° Cumbre de Jefes de Estado del Mercosur y Estados Asociados, llevada a cabo en Asunción, Paraguay, donde Bolivia depositó el Instrumento de Ratificación del Protocolo de Adhesión al Mercosur, el 8 de julio de 2024, para su entrada en vigor en treinta días.

Lo cierto es que, de aquí en más, habrá que negociar en los próximos 180 días el cronograma por el que el cúmulo de compromisos que se está asumiendo en materia arancelaria, aduanera, comercial, libre circulación de capitales, personas y servicios, adecuación de políticas públicas, entre otras, se internalice en un plazo de cuatro años, lo que entusiasma a algunos y preocupa a muchos.

Por eso la alusión a Salomón y a Marx, en el primer párrafo, porque una situación similar como ésta se dio entre 1994 y 1996, cuando de una manera insólita, sin escuchar las advertencias y recomendaciones que públicamente realizó la generalidad del empresariado privado boliviano, Gonzalo Sánchez de Lozada –tozudo y obstinado como era, mal asesorado desde la Cancillería, además– se empecinó en negociar, entre desiguales, un Acuerdo de Libre Comercio con Mercosur. ¿Cuál fue el resultado? No podía ser otro que lo mostrado por las cifras oficiales.

“Desgasificando” la relación comercial con dicho bloque, como corresponde, ya que la exportación de gas a la Argentina data de los años 70 y la venta de gas al Brasil se firmó en 1985 –muy lejos del Acuerdo de Libre Comercio negociado por “Goni” en 1996– el resultado que se ha dado desde la entrada en vigor de la construcción de la zona de libre comercio con Mercosur en 1997, hasta el 2023, es francamente lamentable. Se supone que una pequeña economía como Bolivia debería ser la beneficiada, sin embargo, no fue así, más bien, quien cada vez sale más ganancioso es Mercosur, confirmando así los temores que fueron ignorados: El romántico sueño de Goni & Compañía, se tornó en una pesadilla.

Atrás quedó la narrativa del “mercado de más de 200 millones de consumidores que nos compraría todo”, algo que no ocurrió y de que “la producción mercosuriana no invadiría el mercado boliviano”, lo que efectivamente ha ocurrido.

Entre 1997 y 2023 –sin contar el gas– Bolivia vendió al Mercosur poco más de 9.000 millones de dólares, cifra que palidece frente a los casi 52.000 millones que le compramos, por lo que, un pequeño país como el nuestro ha transferido cerca de 43.000 millones de dólares a los felices productores argentinos, brasileños, paraguayos y uruguayos, mientras que los productores bolivianos pierden mercado, no pueden exportar libremente lo que quisieran y enfrentan trabas de acceso a tan gigante bloque. De ahí la pregunta del “Déjà vu”: El sueño incumplido de que nos iba a ir bien con Mercosur… ¿No se irá a repetir?

 

El autor es Economista y Magíster en Comercio Internacional.



Últimas noticias
El MAS prioriza disputa por el poder
El MAS prioriza disputa por el poder
Walthy Mauricio Egüez Paz ...
Invasiones peruanas
Invasiones peruanas
Juan José Toro Montoya...
MAS de lo mismo
MAS de lo mismo
sin entradilla...
“The Ugly American”
“The Ugly American”
Ronald MacLean Abaroa...
Hacia un espíritu de reparación
Hacia un espíritu de reparación
Víctor Corcoba Herrero...
Con la mirada puesta en Jesús
Con la mirada puesta en Jesús
Víctor Corcoba Herrero...
Beni, un tesoro ignorado
Beni, un tesoro ignorado
Ronald Nostas Ardaya ...
La desnutrición de siempre
La desnutrición de siempre
Severo Cruz Selaez...
Todo cambio es saludable
Todo cambio es saludable
Severo Cruz Selaez ...
Somos país de emociones
Somos país de emociones
David Foronda H....
¡Ahorcado!
¡Ahorcado!
Lupe Cajías...
Arce y el fantasma del dieselazo de 2010
Arce y el fantasma del dieselazo de 2010
Miguel Ángel Amonzabel Gonzales...
Me castigan por ser mujer
Me castigan por ser mujer
Jorge Lizárraga Torrico...
MAS bloqueos
MAS bloqueos
Humberto Vacaflor Ganam...
El vicepresidente y la Ley SAFCO
El vicepresidente y la Ley SAFCO
Eric L. Cárdenas del Castillo...
La vida es un universo de contrastes
La vida es un universo de contrastes
Víctor Corcoba Herrero...
Trata de personas
Trata de personas
Juan José Toro Montoya...
Responsables del retroceso
Responsables del retroceso
Severo Cruz Selaez...
Generar confianza: nunca traicionarla
Generar confianza: nunca traicionarla
Víctor Corcoba Herrero...
Y ahora, ¿qué pasará?
Y ahora, ¿qué pasará?
Jorge Lizárraga Torrico...
La tragicomedia del bicentenario
La tragicomedia del bicentenario
Ignacio Vera de Rada ...
El ocaso izquierdista
El ocaso izquierdista
David Foronda H....
La tormenta Trump
La tormenta Trump
Humberto Vacaflor Ganam...
Sexo, pedofilia y cocaína
Sexo, pedofilia y cocaína
Marcelo Miranda Loayza...
El caudillo bárbaro
El caudillo bárbaro
Eric L. Cárdenas del Castillo...
El sentido de la vida es un poema
El sentido de la vida es un poema
Víctor Corcoba Herrero...
Bolivia en grupo BRICS
Bolivia en grupo BRICS
Fabian Freire...
Ñandubay
Ñandubay
Ernesto Julián Bedregal Patiño ...
Víctimas del odio
Víctimas del odio
Juan José Toro Montoya...
Sobre dos banderas
Sobre dos banderas
sin entradilla...

Encuesta

No hay encuestas activas para participar. Puede consultar nuestras encuestas anteriores