Para la politóloga, es más importante que los partidos opositores se pongan de acuerdo en realizar un control electoral cruzado en las urnas, para así evitar irregularidades en la jornada electoral, como ha ocurrido en el pasado.
Considerando que solamente dos de un total de ocho siglas políticas tradicionales tienen definido a su candidato presidencial para las próximas elecciones generales de 2025, la politóloga, Jimena Costa, manifestó que lo que deberían enfocarse en hacer las alianzas políticas, sobre todo las de oposición, es ponerse de acuerdo en realizar un control electoral en las urnas, para evitar una nueva manipulación de los resultados.
“Es temprano para preocuparnos por partidos, porque solo hay dos candidatos definidos dentro de ocho alianzas habilitadas. Lo que deben hacer es enfocarse y ponerse de acuerdo en hacer un control electoral cruzado, para evitar (las denuncias de fraude electoral) del 2019, porque ninguno podrá hacerlo solo, sobre todo los partidos de oposición”, manifestó Costa en Radio Panamericana, el fin de semana.
En su análisis sobre el panorama electoral en Bolivia, la experta reveló además que la mayoría de opositores tradicionales -entre ellos los expresidentes Jorge Quiroga y Carlos Mesa- están actualmente sin sigla política, advirtiendo que seguramente irán apareciendo más “siglas de alquiler” que ofrecerán su nombre para obtener ciertos beneficios políticos o económicos, una situación que Costa calificó como “deprimente”.
Al inicio de su análisis, Costa recordó que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) postergó seis veces el plazo de habilitación de alianzas políticas, con el fin de que el Movimiento Al Socialismo (MAS) quede habilitado bajo la presidencia del dirigente aliado al “arcismo”, Grover García, en vez de que el partido azul continúe al mando del expresidente, Evo Morales, quien fue inhabilitado también por el Órgano Judicial mediante un fallo del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) autoprorrogado desde inicios de gestión.
El primer partido habilitado y con candidato es Unidad Nacional (UN), con el empresario Samuel Doria Medina como líder y aspirante a la presidencia. Recientemente, este actor político realizó varios actos públicos en los que anunció sus medidas y propuestas para recuperar las divisas norteamericanas, apoyar al sector emprendedor y salir de la crisis económica.
Luego, Costa se refirió al exprefecto cruceño, Rubén Costas, quien con su Movimiento Demócrata Social (MDS) mantiene su cuota de poder en el gobierno actual, según la politóloga. Aunque recordó que esta alianza política estuvo detrás del gobierno transitorio de 2020, señaló que actualmente está sin candidato definido.
Luego le sigue Nueva Generación Patriótica (NGP), una de las siglas más nuevas que se registraron en el espacio político boliviano y que tiene anunciado al empresario cochabambino, Edgar Uriona, como candidato.
Costa manifestó que, luego de investigar las raíces de esta nueva alianza, encontró que “no tiene nada que ver con el MAS, sino que en realidad son de tendencia liberal moderada”. Asimismo, valoró positivamente que, pese a su corto tiempo de existencia, esta alianza “ha construido partido” con una estructura joven y expresó que hay que ver qué es lo que plantea.
En su lista, continuó mencionando al histórico Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), el cual a la fecha no cuenta con candidato. La analista aseveró que esta sigla muy probablemente respaldará la unidad aliándose a otras facciones políticas o “prestando” su sigla a un candidato de renombre.
Hasta aquí, según Jimena Costa, pueden nombrarse los partidos que tienen “una clara postura democrática”, mientras que las siguientes pueden ofrecer su sigla por no perder la personería jurídica, porque una campaña electoral no solamente tiene como fin llegar al poder, según comentó la experta.
“SIGLAS DE ALQUILER”
En adelante, mencionó al Movimiento Tercer Sistema (MTS) del exprefecto de La Paz, Félix Patzi, la cual tampoco cuenta con candidato. Poniendo a esta alianza como ejemplo, Costa señaló que “hay siglas sin estructura, sin organización, sin propuesta ideológica y que pueden dar su sigla a cualquier candidato”, porque parecería que están a punto de perder su personería jurídica.
En cuanto a Unión Civil Solidaridad (UCS) del actual burgomaestre de Santa Cruz, Jhonny Fernández, Costa adelantó que esta bandera política es “muy cercana al arcismo” y que cualquier candidatura que presente este partido puede ser aliada del gobierno actual, pues actualmente no tiene definida a su figura.
Luego se refirió al Frente Revolucionario de Izquierda (FRI), acerca de la cual recordó que, aunque inicialmente le dio su apoyo a la alianza del expresidente Carlos Mesa Gisbert, llamada Comunidad Ciudadana (CC), sugirió que esta sigla probablemente ha disuelto su unión con Mesa y está buscando una nueva alianza, por lo que cuestionó si el FRI se habrá vuelto otra “sigla de alquiler”.
CANDIDATOS SIN SIGLA
En este apartado, la exparlamentaria destacó al rector de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (Uagrm), Vicente Cuéllar, a quien calificó como un “buen candidato” para ser senador por Santa Cruz, un cargo en el que “le irá bien haciendo alianzas”, pero a quien ve “sin capacidad de llevar el peso de una candidatura” a la presidencia.
Comentarios similares emitió sobre el empresario cruceño, Branko Marinkovic, quien anunció su intención de competir por la silla presidencial en 2025, luego de más de una década de exilio por persecución política del MAS. “Pese a su experiencia, Branko no tiene sigla, ni estructura; hay algunos candidatos que solo aparecen en la foto”, comentó.
Respecto a los candidatos, Jorge Quiroga y Rodrigo Paz Pereira, señaló que de momento tampoco tienen sigla, o que al menos esa información no es pública. Enfatizó que la alianza de Paz, Primero la Gente, no es una sigla a nivel nacional.
Otro candidato con notoria presencia mediática es el alcalde de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, a quien Costa no dudó en vincular con el Gobierno: “Manfred no tiene sigla, no tiene papeles, está más que comprobado que está con el ‘arcismo’”, sostuvo.
Acerca de Reyes Villa, Costa señaló que lo considera “un caso particular” porque aparentemente no busca formar alianzas. Cuestionó su idoneidad al recordar que, luego de obtener el primer lugar dentro de la oposición en los comicios de 2005, terminó “fugando del país y abandonando a su bancada”.
Finalmente, Costa se refirió al partido oficialista. En su criterio, aunque el MAS está oficialmente habilitado, aliado con el “arcismo” y que tiene parte del aparato estatal, su futuro es incierto porque no se sabe lo que pasará luego de su proceso interno, ya que no cree que el presidente del Estado, Luis Arce, ni el presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, acepten ser su candidato.
“Tengo enormes dudas de que Andrónico acepte la invitación (del arcismo) a ser candidato”, señaló Costa, tras considerar que, al decantarse por el MAS “arcista”, significaría para el senador alejarse de sus fieles seguidores del Trópico de Cochabamba. (EL DIARIO)