El modelo económico sería modificado y adaptado a los desafíos que emerjan por el ingreso de Bolivia al Mercado Común del Sur (Mercosur) y a los BRICS, con el objetivo de fortalecer la producción. La seguridad jurídica será vital para encarar los retos económicos y frenar los avasallamientos, según productores y economistas.
Como se recordará, el modelo económico comunitario productivo del Movimiento al Socialismo (MAS) tenía como base los ingresos por la venta de gas natural a mercados de Brasil y Argentina, por ello en 2014 ingresó alrededor de 6.000 millones de dólares, pero el año pasado 2024 la cifra bajó a 2.000 millones.
Una caída de 4.000 millones de dólares, indicaba en su momento el analista económico Gonzalo Chávez, al criticar que las autoridades del MAS se olvidaron de restituir las reservas que dejaron los gobiernos anteriores al 2006.
Pero la situación empeora, pues la reducción de los ingresos se asocia a la caída de la producción, es decir, el agotamiento de los megacampos en el sur del país reducen la oferta del energético al mercado brasileño y deja en la incertidumbre el abastecimiento interno, y como el cherry en la torta, Argentina dejó de comprar y más bien negoció el uso de gasoductos para enviar el producto de Vaca Muerta al Brasil.
“El ‘modelo’ de Luis Arce, para sintetizar como lo demostré, no es más que un mix de viejas propuestas cepalinas y de la Estrategia de Desarrollo elaborada en el gobierno de Ovando Candia (1969-1970). Es decir, el mismo vino en otra botella”, según el economista Napoleón Pacheco, escrito en su cuenta @napoeco.
La mayoría de los analistas económicos plantearon cambiar el modelo, debido a que ya estaba muerto por la falta de recursos, y sólo sobrevive con créditos internos y externos, a pesar de la instalación de empresas estatales, estás no generan los recursos que obtenía el Gobierno por la venta de gas.
Los industriales, agropecuarios, agroindustriales y todo el sector empresarial planteó cambiar el modelo o modificarlo para no agudizar la crisis económica en el país, que afecta a las familias más vulnerables.
Los avasallamientos provocan inseguridad jurídica, los controles de precios, la presión tributaria y mayor fiscalización a los productores, sólo provocan ausencia de inversión privada y empuja al país a aumentar la dependencia de las importaciones.
Ya plantearon la reducción del aparato estatal que cada año va creciendo, tal como lo indica el economista Julio Linares en sus redes sociales, de un presupuesto de 500 millones de bolivianos en 2010 pasó a una cifra de 1.132 millones de bolivianos en 2014 y en 2023 el monto casi llegó a los 3.000 millones por el crecimiento de personal en los ministerios.
Aclaró que para el análisis se excluyó a los ministerios de Gobierno, Defensa y Educación, pero que las cifras revelan que la actual administración del Estado normalizó el clientelismo político y cooptación de sectores sociales.
Modelo
El modelo económico será modificado y adaptado a los desafíos que emerjan por el ingreso de Bolivia al Mercado Común del Sur (Mercosur) y a los BRICS, con el objetivo de fortalecer la producción, cualificar la redistribución del ingreso y afianzar la nacionalización, informó el ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro.
“Sobre esos pilares le van a hacer ajustes para que Bolivia tenga una mejor dinámica en su inserción al Mercosur, a los BRICS, a la economía circular, el cuidado del medio ambiente y otros elementos”, explicó y perfiló, por ejemplo, una nueva dinámica en el mercado laboral porque ahora los jóvenes, a diferencia del pasado, tienen hasta dos profesiones.
Anunció que la redistribución del ingreso también tiene que ser mejorada y cualificada, mientras la nacionalización y los recursos que genere deben estar focalizados a mejorar la producción y en beneficio de los bolivianos.
Bolivia es miembro pleno del Mercosur y socio pleno de los BRICS, dos bloques económicos que abren desafíos y oportunidades.
“El modelo económico tiene que ser ajustado para mejorar la productividad del país. Eso es lo que quiere el modelo económico, siempre mejorar la productividad, la generación de ingresos con una sustitución de importaciones”, esbozó sin dar mayores detalles, porque será Arce el que dé cuenta de los ajustes que implementará en el modelo, según la agencia ABI.
Presupuesto
El presupuesto 2025 agregado alcanza a 369.341 millones de bolivianos, mientras que el presupuesto consolidado suma 296.566 millones, es decir, se incrementan en 8,5% y 11,7%, respectivamente, en comparación con el PGE 2024. Del presupuesto consolidado de gasto, de 296.566 millones, el 58,8% (Bs 174.235 millones) corresponde a gastos corrientes, el 17,2% (Bs 51.046 millones) a gastos de capital y el 24,0% (Bs 71.285 millones) a uso de fondos.