Señalan que Luis Arce, en cuatro años, ha avanzado tres veces más el proyecto socialista iniciado por Evo Morales hace 20 años, pues medidas como prohibir importaciones, racionar combustibles y confiscar al sector empresarial buscan destruir la propiedad privada.
> Ven que el fracaso del proyecto socialista en Bolivia es inminente, el capitalismo está muy presente en la sociedad, algo que puede evidenciarse desde los vendedores de la feria 16 de Julio, en El Alto, hasta los productores de clorhidrato de cocaína del Chapare.

En comparación con el expresidente, Evo Morales, quien inició el proyecto socialista en Bolivia hace dos décadas, el gobierno de Luis Arce Catacora aceleró tres veces más rápido la instauración de este modelo en sus cuatro años de gestión, con la destrucción de la propiedad privada, la prohibición de las exportaciones y la escasez de carburantes como de dólares, según observó la politóloga Jimena Costa.
“Si Evo Morales avanzó el 10 o 20%, Arce en cuatro años ha avanzado tres veces más. Todas las medidas que se toman en el Gobierno, como la prohibición de importaciones, escasez de combustibles, escasez de dólares (…) y de yapa lo del PGE (Presupuesto General del Estado) –que se autorice la confiscación a empresarios– son medidas que tienen el objetivo de esa tarea revolucionaria que es destruir la propiedad privada”, señaló Costa en radio Panamericana.
La exparlamentaria se refirió a que el proyecto socialista, apoyado desde el exterior por el “castrochavismo”, sigue el libreto de buscar que el Estado acapare las instituciones y las empresas para poder instaurar una dictadura en la que la población ya no sea capaz de valerse económicamente ni pueda elegir a sus gobernantes. En su criterio, el gobierno de Arce ha acelerado este proceso, iniciado anteriormente por Morales.
Costa indicó que esta “destrucción de la propiedad privada” no está dirigida a la “oligarquía” ni al sector empresario que muchas veces es “aliado” del comunismo, sino que busca atentar contra la iniciativa de sectores emprendedores y empresas personales, pues serían actividades “incompatibles” con el modelo socialista. “El Estado debe acaparar todo: ese es el libreto que Morales empezó incipientemente y Arce aceleró el proceso”, dijo.
La analista resaltó que Arce dio continuidad al proyecto con mayor fuerza por ser un hombre con formación académica socialista, en comparación con Morales, quien llegó al poder siendo un cocalero sindicalista que solamente “repetía el rosario de (el expresidente venezolano Hugo) Chávez y (el dictador cubano Fidel) Castro sin tener formación política más allá de la que le dio Filemón Escobar”.
Agregó que este “padrinazgo” del régimen convirtió al gobierno socialista de Bolivia en un “proyecto transnacional de corrupción, narcotráfico y otras vilezas”. En cuanto a la gestión de Evo Morales, remarcó que sus discursos de pluralidad e indigenismo fueron solo “cosmética” para crear un “modelo profundamente estatista, donde lo privado es sistemáticamente destruido y perseguido”.
FRACASO DEL MODELO
Costa afirmó que otros elementos propios de la ruta hacia el socialismo son los que ya se viven en el país como la falta de separación e independencia de poderes. Sin embargo, la experta manifestó que cree en el fracaso de este régimen ya que la población boliviana, en realidad, no aspira a vivir en un sistema socialista, sino más bien en un modelo gobernado por el capitalismo.
“Yo creo que el pueblo boliviano no lo acepta y por eso hay varios conflictos sociales en la puerta. El MAS ha perdido el apoyo no solo de los no ‘masistas’, sino que perdió a los de su propia base. Este (descontento) hacia el Gobierno es por las políticas implementadas, la ineficiencia, toda la corrupción y por no comprender que la sociedad boliviana no quiere luchar contra el capitalismo”, expresó en el programa Diálogo en Panamericana.
En su criterio, el MAS no es un partido democrático y espera que pueda dejar el poder en las próximas elecciones, pero que la oposición no vuelva a cometer los mismos errores que se vio en el gobierno interino de 2020. “Yo espero que el MAS pierda el poder y que los que lleguen no cometan las estupideces que cometieron los del gobierno de Jeanine Añez”, sostuvo.

MAYOR INGOBERNABILIDAD
La politóloga sustentó sus sospechas en el hecho de que el Estado, gobernado por el Movimiento al Socialismo (MAS) está envuelto en conflictos sociales por la profusa ineficiencia de los gobernantes. En ese sentido, advirtió mayor ingobernabilidad este año.
“Se viene una ingobernabilidad más profunda. Estamos hablando de más de un centenar de conflictos que surgen cada mes, la mayoría dirigidos al nivel central del Estado; problemas económicos e insatisfacción ciudadana por incumplir compromisos electorales; o deficiencias en servicios públicos. La mayoría de conflictos subnacionales están dirigidos al MAS y son en contra de la ineficientica del MAS en el poder”.
Para Costa, el problema de fondo es que no se logró construir un Estado Plurinacional y el centralismo es mayor al que había antes de la política de participación popular instaurada por el MAS.
“Han avanzado muy mal en la construcción del Estado. Quiero ver en qué ámbitos los resultados son satisfactorios. En todos los municipios hay serios problemas con los alcaldes. En salud, caminos, educación, cuidado de medio ambiente… ¿en qué podemos decir que hubo buena gestión? La Gestión de la Gobernación en La Paz es prácticamente nula”, apuntó la politóloga.