El ejecutivo de la Confederación de Trabajadores de Educación Urbana de Bolivia (Cteub), Patricio Molina, informó que luego de un ampliado de emergencia y tras conocer las declaraciones del ministro de Educación, Edgar Pary, se definió instalar piquetes de huelga de hambre, cumplir un paro de 48 horas para el jueves y viernes de la próxima semana, además, continuarán movilizados con bloqueos y marchas, en protesta a la no atención a sus demandas.
“Frente a las demandas irresueltas, en un ampliado se ha decidido radicalizar las medidas porque no tenemos respuesta del Ministerio de Educación. La próxima semana, el día jueves y viernes habrá un paro de 48 horas, el martes se va a instalar huelgas de hambre en las 31 federaciones del país, seguimos con las movilizaciones pacíficas”, apuntó el dirigente.
Los educadores agradecen la incorporación de los padres de familia en la lucha por las demandas planteadas al Ministerio de Educación y anuncian que desde el martes se instalará 31 piquetes de huelga de hambre en los nueve departamentos, en tanto que jueves y viernes cumplirán un paro de 48 horas con suspensión de actividades.
Molina indicó que harían llegar una nueva contrapropuesta al ministro de Educación, Edgar Pary, para reactivar una mesa de diálogo y de esa manera evitar las medidas anunciadas. “Nosotros hemos consensuado y en ese marco, a primera hora buscaremos las conexiones en el ministerio para hacer llegar la respuesta”, sostuvo.
Las demandas que el Magisterio Urbano pide están resumidas en cinco puntos: el presupuesto educativo, déficit histórico, crecimiento vegetativo, rechazo a la nueva malla curricular y el congreso educativo.
Por su parte, el ministro Pary, indicó que las movilizaciones son alentadas por intereses políticos de algunos dirigentes de las federaciones departamentales, sobre todo, de La Paz y Cochabamba.
“Han visto al Comité Cívico apoyando al paro del magisterio aquí en Santa Cruz, lo mismo en Potosí y en La Paz, desde el 2022; entonces no es una reivindicación sectorial real, sino que está motivada por intereses políticos que pretenden empañar nuestra democracia en Bolivia”, sostuvo, luego de informar que algunas marchas y bloqueos, del pasado viernes, fueron acompañados por personas que no eran del magisterio urbano, sino integrantes de los comités cívicos.