En la zona de la Terminal de Buses de Quillacollo hay toneladas de desechos que están esparcidos, sin ningún tipo de tratamiento y que generan mal olor.
Ayer se cumplieron siete días desde el inicio del bloqueo en el vertedero de Cotapachi, en Colcapirhua, que llevan adelante comunarios de la Central Regional de Cotapachi, en Cochabamba.
Los movilizados exigen la aclaración sobre el derecho propietario de las casi 250 hectáreas que son alquiladas por el Ministerio de Defensa a las alcaldías de Colcapirhua y Quillacollo y que son usadas como vertederos. La última reunión sobre este tema se suspendió debido a que las bases de los sectores en conflicto no aceptaron el acuerdo previo de los dirigentes.
En la parte posterior de la Terminal de Buses, que no está siendo utilizada, la basura acumulada ya está en estado de descomposición.
Los vecinos piden que la Alcaldía de Quillacollo cumpla con los controles para evitar que se siga llevando basura al lugar, pues esto está prohibido.
La basura del lugar se encuentra a solo metros de la terminal de Quillacollo. Además, de a corta distancia de viviendas habitadas.
Hasta el martes, las autoridades lamentaron que debido al bloqueo en el botadero de Cotapachi hay más de 2.260 toneladas de basura acumulada de los municipios de Quillacollo y Colcapirhua, del departamento de Cochabamba. (Cochabamba, agencias)