Los pobladores del Distrito 1 y barrios aledaños de la Ceja de El Alto piden a las autoridades nacionales el retorno del proyecto BOL-110 y estaciones policiales, debido a la proliferación de la delincuencia, según el dirigente Pablo Daza.
La preocupación de los habitantes de barrios como Villa Dolores, 12 de Octubre, entre otros fue debido a que de un tiempo a esta parte, sus calles se han convertido en verdaderos peligros para el tránsito peatonal debido a los robos y asaltos que suceden a diario y a plena luz del día.
“Es lamentable que a pesar de los datos que tiene la Policía y el mismo Gobierno central de lo peligroso que se ha vuelto la ciudad de El Alto, hasta el momento no se haga nada para resguardar la integridad física de sus habitantes, porque los robos, asaltos y asesinatos a plena luz del día es el diario vivir en nuestras zonas y ninguna autoridad municipal ni nacional dice nada”, denunció el dirigente.
La falta de seguridad ciudadana en la urbe alteña, dio lugar a que muchos de los vecinos tomen algunas decisiones como el cierre de sus calles con cadenas, la implementación de alarmas vecinales, pero no es suficiente, debido a que los antisociales se dan modos para burlar todas estas advertencias.
Daza, recordó que un anterior Gobierno Municipal de esta ciudad tuvo el proyecto BOL-110, que no se concretó totalmente, por lo que exigen a la actual alcaldesa Eva Copa, que retome este tema que consiste en la implementación de mayor número de efectivos policiales para el patrullaje en las calles, así como la implementación de cámaras de seguridad.
Por otro lado, se debe efectuar la construcción de una Estación Policial Integral (EPI) por cada distrito municipal, tema que también estuvo contemplado en el proyecto BOL-110, pero a la fecha no se conoce los avances ni cuál fue el destino de este proyecto.
“Uno de los problemas que ha dado lugar a todos estos problemas de inseguridad en nuestras calles, es el crecimiento poblacional que ha hecho que queden insuficientes los pocos policías se vean en nuestras calles, porque, según informes de la misma institución del orden, Mediante el Comando Regional la ciudad de El Alto, no cuenta ni siquiera con mil policías para más de un millón de habitantes”, expresó el dirigente del Distrito 1.
De esta forma, grupos de pandillas delincuenciales de hasta 10 personas atemorizan a la ciudadanía, quienes por temor a las represalias ya no pueden hacer nada, porque las amenazas de venganza si es que los delatan o intervienen en sus atracos son continuos.
Según los datos que tienen los propios vecinos, los asaltos y robos mayormente son los fines de semana donde aparecen personas muertas y nadie hace nada.