La preocupación de los vecinos de esos barrios que, en la mayoría se encuentran en zonas alejadas, es la falta de este servicio, donde el uso de los pozos ciegos, significan un riesgo para la salud de sus habitantes, porque los olores que despiden son inevitables, además de la inversión económica de por lo cada seis meses para el vaciado de estos pozos.
“Es una pena para nosotros que a pesar de ser el distrito que más zonas tienen y fue uno de los sectores que ha luchado por muchas de las reivindicaciones de nuestra ciudad, todavía continúe olvidado por las autoridades municipales y nacionales y no solo en este tema de los servicios básicos, sino en muchas otras necesidades”, señaló el dirigente Menacho.
FALTA DE INFRAESTRUCTURA
Uno de los principales problemas que perjudicó la ejecución de obras de infraestructura en este distrito es el apoyo de las autoridades municipales, que según los propios vecinos muchas de las obras en la Ciudad de El Alto, fueron politizados por el gobierno municipal saliente de Soledad Chapetón, quien priorizó algunos de los trabajos en este sentido para aquellos barrios que apoyaron su gestión.
“Podemos decir que sectores como Parcopata, Copacabana, Ventilla y otros no cuentan con el mejoramiento de vías, por lo que este tema se convierte en una preocupación, porque la tierra y el barro, así como las aguas en la época de lluvias, se convierte en verdaderos problemas para los vecinos, con riesgos de hasta inundaciones que se han sufrido en épocas pasadas”, dijo el dirigente del Distrito 8.
En el momento existe una nueva Federación de Juntas Vecinales, denominada, Fejuve del Sur, que pretende realizar muchos trabajos en favor de este sector, debido a que las anteriores y las actuales paralelas y divididas, poco o nada han trabajado en favor de todos los barrios alteños, donde sus dirigentes solo de dedicaron a manejar esta institución de los vecinos de manera política, siendo que de esta manera muchos otros distritos municipales fueron olvidados.