El presidente del Estado, Luis Arce Catacora, anunció la implementación de una pausa ambiental de 10 años en las áreas afectadas por los incendios forestales, como parte de un programa integral de reforestación.

El anuncio fue hecho en la Cumbre de Líderes del G20 en Río de Janeiro, Brasil; y este plan busca mitigar los daños ocasionados por los incendios, que este año consumieron más de 10 millones de hectáreas de bosques y pastizales en el país.

“Bolivia sufrió incendios en gran parte de nuestra Amazonía, como sucedió en Brasil y otras partes. Estamos entrando a un programa de reforestación muy agresivo, donde vamos a hacer una pausa de 10 años en esas zonas quemadas para poder reforestarlas”, declaró Arce en una conferencia de prensa.

El mandatario destacó que esta iniciativa no solo busca regenerar las áreas afectadas, sino también garantizar la sostenibilidad de las comunidades indígenas que dependen de los bosques.

“Necesitamos recursos no solamente para la reforestación, sino también para dar una vida sostenible a esos indígenas que viven en los bosques, que han sido afectados por los incendios, pero que necesitan un modo de vida compatible con el medio ambiente y el respeto a la Madre Tierra”, enfatizó.

Arce lamentó que Bolivia, a pesar de sus esfuerzos por reducir las emisiones de carbono, no recibió apoyo financiero internacional. “Bolivia está haciendo muchos esfuerzos por reducir la emisión de carbono en nuestro país, pero no hemos recibido absolutamente nada”, afirmó. Por ello, instó a las naciones industrializadas a asumir su responsabilidad y aportar recursos para financiar programas medioambientales y tecnológicos que sean accesibles para países en desarrollo.

El Presidente también subrayó que Bolivia ingresó decididamente a un programa de evaluación de emisiones de carbono como parte de su compromiso con la lucha contra el cambio climático. Sin embargo, enfatizó que estos esfuerzos requieren el respaldo de la comunidad internacional.

Además, Arce destacó el modelo económico boliviano, que promueve la redistribución de ingresos y la justicia económica y citó como ejemplo el Impuesto a las Grandes Fortunas, vigente desde 2021.

También reiteró el compromiso de Bolivia con la resolución pacífica de conflictos y rechazó el uso de la fuerza armada en el escenario global, refiriéndose específicamente a la guerra entre Rusia y Ucrania.

El G20 reúne a líderes de las principales economías del mundo y organismos internacionales para abordar desafíos globales, incluyendo la sostenibilidad, la economía y la paz mundial. La participación de Bolivia destacó por su enfoque en el medio ambiente y su llamado a la acción colectiva para enfrentar los desafíos del cambio climático.(Brújula Digital)