El director de la Escuela, Marcelino Osco, según AMUN, dijo que desde el pasado 27 de junio se ha trabajado en la conservación preventiva del conjunto escultórico de plaza Murillo, se ha hecho limpieza de todas las estatuas donde se encontró excremento de aves, hollín, incluso palomas muertas. Además del mantenimiento de las bases de mármol de las piezas.
Como cada año en estas fechas, la escuela taller realiza el mantenimiento de todas las piezas escultóricas que se encuentran en kilómetro cero, tomando en cuenta que, el viernes 15 de julio, se trasladará los restos de Pedro Domingo Murillo hasta ese lugar y se desarrollará un acto protocolar.
Los restauradores iniciaron sus labores con la limpieza en seco de todas las piezas arquitectónicas, siguieron por el lavado con jabón iónico y neutro para eliminar los restos de hollín y otros elementos. La escuela desplegó a más de 20 estudiantes y un monitor para la ejecución de las obras.
En la plaza Murillo hay seis monumentos: la pieza central de Pedro Domingo Murillo, ocho esculturas alegorías que representan a las estaciones del año, un bloque de piedra comanche en forma de libro donde está la proclama de la junta tuitiva. Además de un estribo de señalización histórico, patíbulo simbólico y el busto de bronce del expresidente Gualberto Villarroel.
Con relación al busto de Villarroel se quitó la pintura negra que cubría toda la pieza de bronce, con el fin de que se aprecie el material original con el que fue elabora. La base es de piedra basalto que no presentaba otros daños.
Mientras que la escultura de Murillo presentaba daños leves debido a la acumulación de tierra, hollín y excremento de aves. El pedestal tenía daños por la humedad y algunos restos de pintura.
La escultura del prócer paceño fue esculpida por el artista italiano Ferrucci Cantele, en Roma, por encargo del Concejo Municipal de La Paz, que en 1907 aprobó el proyecto escultórico bajo el denominativo de “Monumento a Murillo”, recordando el centenario de la gesta libertaria. (AMUN)