Los artesanos en diferentes rubros pertenecientes al Consejo de Central de Federaciones y Asociaciones de Artesanos El Alto (Cosedal) llegaron a reactivarse económicamente en mínima cantidad, solo el 5 % de un total de 10.000 afiliados, según el dirigente, Héctor Delgado.

De acuerdo con el representante, el principal problema que atravesaron los artesanos de la ciudad de El Alto fueron las restricciones de salud que se dieron a causa de la pandemia del coronavirus, donde muchos trabajadores de este sector cerraron sus pequeñas producciones.

Otro de los principales problemas que causó la quiebra de muchas unidades productivas, es el contrabando que entra desde otros países vecinos, donde la materia prima y en otros casos productos fabricados en diferentes rubros, ingresan a bajos costos provocando este problema a los artesanos alteños.

“Es lamentable que nuestro gobierno no pueda lograr controlar este problema que a la fecha continúa dando mucha preocupación a los artesanos, en este caso de la ciudad de El Alto, porque nuestra calidad de producto supera a todo el contrabando, pero los precios bajos con que llegan es la preocupación que tenemos”, indicó Delgado.

De la misma manera, todos estos problemas han logrado que muchos artesanos decidan migrar a otros sectores, como al transporte y la agricultura, porque a falta de apoyo tuvieron que cerrar sus unidades familiares, debido a que llegaron a terminar los pequeños capitales con que contaban antes de que se inicie la pandemia del coronavirus.

Sin embargo, según el dirigente Delgado, en el momento existe la posibilidad de retomar sus actividades poco a poco, teniendo la posibilidad de cooperación por parte de algunas autoridades como el Gobierno Municipal de esta ciudad que comprometió su colaboración en diferentes aspectos, con la finalidad de una reactivación económica que pueda permitir el retorno de muchos artesanos a retomar sus trabajos.

Uno de los rubros que más fue golpeado por el contrabando, es la carpintería, sector que a causa del contrabando, tuvieron que cerrar varias de sus unidades productivas para dedicarse a otras actividades para sostener a sus familias.

“Nuestro principal enemigo son los muebles chinos que entra al país de contrabando que llega a precios bajos, pero sin tener en cuenta la calidad del trabajo que tienen, porque nosotros elaboramos muebles de alta calidad y de madera y no así de trupan, por eso pedimos a las autoridades del país que el control en las fronteras debe ser más estricto”, señaló el dirigente.

Finalmente, Héctor Delgado aseguró que hasta la fecha y producto de algunas actividades que se realizaron en coordinación con el municipio, como la asistencia a diferentes ferias artesanales como Santa Cruz y Cochabamba, los artesanos de la ciudad de El Alto, hasta el momento han logrado el 5 % de la reactivación económica de más de 10.000 artesanos en diferentes rubros con que cuenta esta urbe.