El ministro de Salud y Deportes, Jeyson Auza, descartó ayer que el país se encuentre frente a una escalada de casos de viruela del mono debido a que aparecen a diario nuevos pacientes y aseguró que las brigadas médicas intensifican los rastrillajes para detectarlos, atenderlos y evitar su diseminación.
“En este momento no podemos decir que la escalada es muy alta o el índice de infectividad es muy alto, estamos tomando los recaudos necesarios y queremos identificar cada uno de los casos sospechosos de viruela del mono”, aseguró la autoridad de Estado.
Hasta este jueves en el país se registró un total de 37 casos, de esa cantidad, 35 corresponden al departamento de Santa Cruz, uno a Potosí y otro a La Paz, reportó Erbol.
Desde mayo se ejecutaron medidas como la emisión de protocolos y un manual que unifica el trabajo de todos los servicios departamentales de Salud (Sedes) para un tratamiento oportuno ante la llegada de la viruela símica.
Se desplegaron brigadas médicas especializadas para la atención eficiente y oportuna del paciente, además de la habilitación de un centro de aislamiento con 25 camas, medicamentos gratuitos mediante el Sistema Único de Salud (SUS), pero, sobre todo, dos laboratorios que cuentan con la tecnología de punta y los reactivos que identifiquen la enfermedad en el menor tiempo posible, indica un reporte del Ministerio de Salud.
La viruela símica es una enfermedad causada por el virus del mismo nombre. Es una enfermedad viral zoonótica, lo que significa que puede transmitirse de los animales a los seres humanos. También puede propagarse entre personas.
El protocolo de alerta epidemiológica fue aprobado por el Gobierno nacional en mayo, contiene un manual que fue remitido a todos los Sedes con el objetivo de unificar el trabajo y estar preparados ante el surgimiento de pacientes que contraigan esa enfermedad.
El documento en su contenido cuenta con un resumen situacional, la forma de transmisión de la enfermedad, vigilancia epidemiológica que ya el Gobierno boliviano fue aplicando ante la presencia de cualquier enfermedad, estudios investigativos y científicos, además del manejo clínico que se debe dar en caso de contar con un caso en el país.
Desde la llegada de la viruela símica el Gobierno boliviano intensificó con brigadas médicas especializadas la búsqueda de casos de viruela del mono en el país para prevenir, atender y evitar su diseminación, con una estrategia epidemiológica responsable.
“Lo que queremos es detectar estos casos, no se debe estigmatizar esta enfermedad, queremos detectar para atenderlos y para evitar su diseminación”, indicó el ministro de Salud, Jeyson Auza.
Bolivia cuenta con dos laboratorios especializados para la realización de las pruebas que son el Instituto Nacional de Laboratorios de Salud (Inlasa) con sede en La Paz y el Centro Nacional de Enfermedades Tropicales (Cenetrop), en Santa Cruz que cuentan con los equipos de última generación y reactivos suficientes para atender la demanda en todo el país.
“Se hacen a través de pruebas moleculares y serológicas, es decir, se toman muestras de las lesiones o erupciones que pudiera presentar la persona, así como la muestra de sangre para poder asociar la patología con alguna otra que tuviera parecido tal el caso de la varicela o rubeola asociada con la viruela del mono”, explicó la directora del Inlasa, Evelín Fortún.
Frente al arribo de la enfermedad al país, el Gobierno nacional procedió a ofrecer información precisa oportuna y frecuente sobre la evolución de la viruela símica, de hecho sobre la importancia de prevenir la misma con medidas de bioseguridad que son similares a las del covid-19 es decir, el uso del barbijo, evitar acercamiento estrecho con la persona que tenga síntomas de la misma, entre otros.
Las manifestaciones de la viruela símica suelen incluir fiebre, dolor de cabeza intenso, dolores musculares, dolor de espalda, poca energía, ganglios linfáticos inflamados y una erupción cutánea o lesiones.
La erupción comienza entre uno y tres días después del inicio de la fiebre, las lesiones pueden ser planas o ligeramente elevadas, llenas de líquido claro o amarillento, y luego pueden formar una costra, secarse y caerse, reflejó ABI.
De los 37 pacientes que fueron reportados positivos en el país, dos ya se encuentran a puertas de ser dados de alta luego de haber superado la enfermedad y encontrarse en etapa de secado de las lesiones, informó el Ministerio de Salud.