En las inspecciones estuvo personal del viceministerio de Defensa del Consumidor, y de Comercio Interno, además de efectivos de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) y expertos del Instituto Boliviano de Metrología (Ibmetro).
En el recorrido se identificaron irregularidades en dos frigoríficos, uno de ellos tenía desfases en sus balanzas de hasta cinco kilos y, en el otro negocio, similares aparatos tenían diferencias de tres kilos.
“Por esta irregularidad en las balanzas, ellos generan mil dólares de ganancia ilícita por frigorífico, porque le están robando en el peso a los carniceros, a las carniceras, que van a comprar por mayor para vender por menor”, detalló el viceministro de Defensa de los Derechos del Usuario y Consumidor, Jorge Silva.
También se sancionó a los propietarios de otros frigoríficos por la falta de documentación legal que acredite su funcionamiento higiene e incumplimiento a los requisitos de inocuidad en la manipulación del producto, con 10.000 UFV (Unidad de Fomento a la Vivienda).