La exhumación tuvo lugar ayer en el Cementerio General y los restos llevados a la Academia de Historia Militar Boliviana, escoltados por el Regimiento Colorados de Bolivia, donde se realizó una misa y un acto de homenaje y el director de esa dependencia militar, contralmirante Miguel Álvarez, pronunció un emotivo discurso.
También hicieron uso de la palabra la representante de la Asociación de Descendientes de los Héroes de Boquerón, Nora Chuquimia y la presidenta de la Asociación de Viudas y Bisnietos de Beneméritos de la Guerra del Chaco filial La Paz.
En la capital del Estado está programada una misa en la Catedral y un homenaje en la Región Militar que se realizarán hoy; para mañana jueves se tiene previsto un acto especial en la Casa de la Libertad y luego el entierro en un mausoleo.
El general Manuel Marzana Oroza fue uno de los principales héroes de la Guerra del Chaco (1932-1935) y destacó en la defensa del Fortín Boquerón en septiembre de 1932, donde al mando de no más de 600 hombres enfrentó a un número mayor de paraguayos; estas acciones fueron posteriormente calificadas por historiadores como una acción militar destacada.
Concluida la contienda y a su retorno del Paraguay, donde estuvo prisionero, el general Manuel Marzana Oroza se desempeñó como prefecto del departamento de Chuquisaca y murió por causas naturales en 1980.