Luego de una tragedia que vivió la familia de dos hermanitos alteños tras sufrir serias quemaduras cuando su casa se incendió, la alcaldesa de El Alto, Eva Copa, anunció la reparación de la vivienda que los chiquillos compartían con su madre. Además, se activará una cruzada para colaborar con mobiliario a este hogar.

“Esperamos concluir la refacción para ‘Reyes’ (6 de enero de 2023), ese será nuestro regalo. Hemos hecho una limpieza total de la casa que está totalmente quemada”, informó la autoridad municipal.

Asimismo, anticipó la posibilidad de activar una campaña solidaria para adquirir muebles, utensilios de cocina y otros accesorios para la familia. “Así que muy pronto les daremos la sorpresa a esos dos angelitos que han perdido todo, pero sé que el Señor les va a bendecir”, sostuvo.

“Quisiera pedir también ropa, víveres, (en) mi casita se quemó todo, no tenemos nada. Pido ayuda a la población con lo que puedan”, solicitó Olga, la mamá de los niños cuando ocurrió el siniestro.

Personal de la Dirección de Obras Municipales (DOM) se encarga de la refacción de la casa y en la faena, retiran escombros, puesto que las llamas tumbaron el cielo falso y dañaron muros, también cambian vigas y cubiertas del techo; instalarán nuevo sistema de energía eléctrica y revocarán paredes con estuco y pintura.

HECHO

El 13 de noviembre, los hermanos Liz de 5 años y Alexander de 9, lograron sobrevivir del incendio producido por una fuga de gas en casa ubica en la zona Valle Hermoso en el Distrito 7 de la urbe alteña.

Los chiquillos se quemaron cuando intentaban prepararse té y la madre se había ausentado para trabajar, pero al llegar supo de la desgracia.

El más afectado fue Alexander, quien, de acuerdo con el relato de su madre, protegió a su hermana al abrazarla y de esa forma intentar evitar que las llamas la dañen. El informe médico daba cuenta que los niños tenían quemaduras de primer, segundo y tercer grado.

El niño es quien se encontraba en un estado más crítico, sus manos mostraban severos daños y no descartaban amputarlas. Por eso, fue internado en terapia intensiva.

Sin embargo, la pronta intervención de los médicos logró su estabilización. “El niño tiene el 35 por ciento de su cuerpo quemado, en un momento se comprometía mucho las manos, ahora está estable, las manitos ya tienen temperatura. (La niña), tiene el 10 por ciento de quemadura, está estable y se realiza las curaciones”, detalló en ese entonces, el jefe de la Unidad de Quemados del Hospital del Niño, Rafael Romero.

Ya un poco más tranquila, su mamá relató el estado de salud de Alexander, a tiempo de pedir ayuda de la gente. “A mi hijo mayor lo sacaron de terapia intensiva y ahora está en sala de quemados, cama 11. Nosotros necesitamos medicamentos para mis hijos, me pidieron gotas y cremas para sus ojos”, dijo la madre, en ese tiempo.

Durante todo ese tiempo, ella se quedó junto a sus retoños, sin volver a su hogar y durmió en el nosocomio. Solo sus vecinos le comunicaron que todo se quemó y que prácticamente nada servía.

Gracias al apoyo de autoridades, personas e, incluso, instituciones, esta familia supera el amargo momento que les tocó vivir y ambos niños, se encuentran en recuperación en un hospital paceño.