“Más o menos estamos recogiendo entre 600 a 800 kilos diarios de residuos patógenos Covid-19 en todo el municipio de La Paz, de 34 puntos de recolección. En el mes de mayo se han recogido 8.701 bolsas, esto es equivalente a 23,5 toneladas”, informó el director del Sistema de Regulación y Supervisión Municipal (Siremu), Rubén Ledezma.
Los desechos se depositan en pequeñas celdas que son cavadas de un metro por uno, dentro de una celda mayor que corresponde a los patógenos hospitalarios. Ledezma dijo que se abre un hueco por día y para este fin el personal responsable debe usar trajes especiales; en tanto, para el traslado se usan dos furgonetas que están equipadas para evitar alguna contaminación.
El recojo de esos desechos es el primer paso, son 34 puntos que se habilitaron para la acumulación de los mismos dentro de bolsas especiales, pues al tratarse de material contaminante es que los obreros de la comuna paceña ya portan traje, guantes, mascarillas, botas y lentes que cubren el cuerpo.
Para el segundo paso, dijo Ledezma, se llega al relleno de Sak’ Churu que está en Alpacoma y en el interior se divisa una celda especial donde se depositan los residuos hospitalarios, en un sector está delimitado el espacio para lo que será la basura Covid-19. Son como pequeños nichos y sobre el piso y paredes de cada hueco se rocía cal para que queme los desechos, ese es el tercer paso.
A continuación, prosiguió Ledezma, los vehículos que llegan al vertedero descargan la basura y como quinto paso, los obreros se envuelven con otros trajes especiales para retirar los desechos. Ya para la siguiente etapa solo se espera a que la cal haga reacción química sobre la basura, algo que los trabajadores llaman como “inertización”.
El séptimo paso es llenar de tierra el hueco hasta el nivel, lo que le da una apariencia de nicho y para finalizar la secuencia de actividades, el personal se desinfecta bajo un estricto protocolo que fue aprobado con normas nacionales, indicó Ledezma.
La autoridad edil recomendó a la ciudadanía usar los implementos de bioseguridad para protegerse del virus y también al momento de desechar los residuos patógenos. Para depositar las bolsas en los contenedores, sugiere que se lo haga en doble envase y rociar con un poco de lavandina en los agarradores, esto para cuidar también la salud del personal que recoge.
“Normalmente un enfermo está en una habitación aislado, donde se hace la atención, entonces esa persona en su habitación tiene que tener su propio contenedor donde todos sus residuos los coloque ahí en una bolsa para evitar contagiar a otras familias”, recomendó Ledezma.