“Y una vez que lleguemos a los 10 años vamos a abrir al público y será un bosque totalmente consolidado y bien cuidado, este va a ser un nuevo santuario, un nuevo pulmón del municipio”, informó el director de Áreas Protegidas, Bosques y Arbolado Urbano, dependiente de la Secretaría Municipal de Gestión Ambiental, Marcelo Lorberg.
Explicó que dos meses antes de ejecutar el “Plan de Restauración Ecológica del Relleno de Mallasa”, se elaboró una línea base de la biodiversidad para identificar las diferentes especies de flora y fauna que existen en el área verde, para realizar una comparación porque se espera que reaparezca mucha biodiversidad de flora y fauna, hecho tiene trascendencia ecológica.
“Hemos hecho un censo arbóreo en el lugar, con todos esos elementos, hemos decidido sembrar un nuevo bosque, donde se va a incorporar 6.000 plantines de diferentes especies como: molle, jacarandá, acacias para darle nitrógeno; en arbustivas: algarrobos, kantutas, chacateas, mieliferas, y especies cactáceas distribuidas en 12 hectáreas del espacio”, informó Lorberg.
Detalló que el exrelleno de Mallasa actualmente se encuentra con acceso restringido y en fase de cierre ambiental y continuará cerrado por 10 años en los que se realizarán mantenimientos controlados, además de reafirmar convenios con universidades, biólogos, agrónomos y activistas para garantizar la ejecución del plan de regeneración con el que se espera resurjan variedades de especies flora y fauna, publicó AMN.
“Este tipo de restauración ecológica no existe en Latinoamérica”, dijo Lorberg, a tiempo de expresar que este proyecto podría llegar a ser un modelo para otros países.